Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
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Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
que hay, aqui Aro para dejar un relato que he dejado en otros foros, espero que les guste, pero empesare con el prologo nnU
Prologo
La historia de dos chicos que pasaron de una amistad a una enemistad cuando ofrecieron sus vidas a ser criaturas de la noche. Se involucraron en una guerra ancestral y ahora uno de ellos tiene la decisión de quitarle la vida al otro para acabar con esta guerra y que uno sea el vencedor.
Ya en la actualidad, deberá fingir ser alguien quien no es y descubrirá que hay alguien quien sufre con la misma situación que el; y que no esta conciente del origen de su familia, situación que traerá revelaciones del pasado y inevitables luchas entre ambos bandos.
Prologo
La historia de dos chicos que pasaron de una amistad a una enemistad cuando ofrecieron sus vidas a ser criaturas de la noche. Se involucraron en una guerra ancestral y ahora uno de ellos tiene la decisión de quitarle la vida al otro para acabar con esta guerra y que uno sea el vencedor.
Ya en la actualidad, deberá fingir ser alguien quien no es y descubrirá que hay alguien quien sufre con la misma situación que el; y que no esta conciente del origen de su familia, situación que traerá revelaciones del pasado y inevitables luchas entre ambos bandos.
Última edición por Aro Vulturi el Miér Mar 18, 2009 12:07 pm, editado 6 veces
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
ahora, dejo el prier troso del primer capitulo, ya que aporto los capitulos en tres nnU.
Capitulo 1: Cesar
- A veces pienso que no soy yo misma cuando huelo la sangre…también pienso que puedo arriesgar la vida de mis amigos de mi escuela… ¿habrá alguien quien tenga la misma carga que yo?
Se decía Dafne todas las mañanas cuando iba a la escuela, su vida es social como cualquier estudiante, aunque nunca iba a fiestas o bailes. En especial cuando la invitan a una carne azada, ella se rehúsa rotundamente a participar. Sus compañeros se preocupaban al ver como ella reacciona cuando ve a alguien comer carne, le llegaban unos mareos tremendos e incluso se retira al baño o al patio para relajarse.
Era un caluroso día de verano cuando la vida de Dafne y su familia sufrirían un gran cambio. Su maestra de literatura, una señora bajita de buen corazón, anunció la llegada de un nuevo alumno; el estudiante se suponía que iba llegar a la clase de dicha maestra, pero nunca llego. Al pasar la siguiente clase, Física, la cual era impartida por un maestro delgado con lentes y de mal humor; un joven entro al salón, con la fachada de maleante y anoto su nombre en el pizarrón sin el permiso del maestro.
- Mi nombre es Cesar… ¡y al quien no le interesa mejor ni se meta conmigo!-
Decía el chico con un acento español, mientras golpeaba el escritorio del maestro con autoridad, su apariencia era vulgar, con una chaqueta negra rota en los codos, una camisa blanca sucia con lodo, su rostro cubierto de tierra y grasosa; cabello alborotado con enormes patillas que cubren sus mejillas. Muchos se asustaban al ver como se comportaba el joven, a excepción del maestro, Dafne, el representante del salón y el típico chico alto y fornido del salón que nada le intimida.
Al llegar la maestra de literatura, antes de que empezara una guerra en el salón, explicó que Cesar es su nuevo compañero. Nadie se imaginaba a tal personaje como su nuevo compañero, el cual empezó a escupir en el suelo tratando de atinar al cesto de basura. Se sentó en un pupitre vació que se ubicaba a lado de la ventana de la cuarta fila horizontal a dos pupitres lejos de Dafne.
Dafne observaba al chico y se fijaba en sus rasgos, notaba que su aspecto no era el de un humano normal, más bien como si fuera un animal. También por su expresión, mientras miraba por la ventana, podía compararse con la de un animal enjaulado.
Más tarde Cesar se escapó de la clase de Educación física, mientras todos se ponían hacer ejercicio como soldados preparándose para una posible tercera Guerra Mundial. Era donde todos daban su opinión sobre el nuevo chico sin que él escuchara.
Todos empezaron con un mal comentario en especial el representante quien suponía que Cesar era un expulsado de otra escuela por su comportamiento. Otro suponía que Cesar fue expulsado de su país, una alumna decía que Cesar era horrendo, mientras otra alumna expresaba lo malo de su aspecto físico y Dafne dio el comentario final.
- Mientras que no se junte con nosotros esta bien…-
Solo lo dijo para estar de acuerdo con sus compañeros.
Después de educación física, Dafne salió primero del gimnasio y al caminar distraída se encontró con Cesar, quien frunció el seño delante de ella. Notó lo alto que era, al menos la rebasaba por una cabeza, y con timidez escuchó como él hacia un gruñido bestial entre sus dientes.
-… ¡Hola…Cesar!-
Cesar no le dirigió la palabra y se fue a otro rumbo. Era como si el hubiera escuchado lo que ella y los demás dijeron en sus espaldas. De regreso al salón, ella deseaba regresar a su casa pronto, el comportamiento de Cesar la ponía nerviosa y ver como él observaba al resto de la clase con la misma mirada de odio que le dirigía a ella. Todos guardaban su distancia ante él, excepto una alumna de facciones muy delicadas y elegantes, el cabello tan negro como el carbón, liso y largo como las cascadas y sus ojos tan brillantes como perlas, como su nombre.
Perla era la única que no se alejaba de él, incluso acepto el trato de intercambiar su lugar con otro compañero que estaba atrás de Cesar. Dafne no le importo la cercanía entre Perla y Cesar por un tiempo, hasta que por fin llegó la hora de la salida. Con un gran apuro de salir, Dafne logro salir fuera de la escuela hasta tomar un autobús que la llevaría a su casa. Monterrey era una ciudad ubicada en estado de Nuevo León al norte de México, era una ciudad enorme que cada vez crecía mas infestada también de mucho trafico por lo que era tardado viajar de un lugar a otro. Llegando a su dulce hogar, la chica contempló su lujosa fachada de arte contemporáneo, con grandes ventanales; llegó a la puerta donde fue recibida por un golpe de la perilla.
-Ups…¡¡perdón hermanita!!...-
Decía un chico delgado con el cabello negro con una cola de caballo cerca de su patilla derecha, piel pálida y orejas puntiagudas. Se reía del infortunio de su hermana menor que se despegaba de la puerta con furia. En eso, el joven burlón siente un fuerte estirón de orejas de parte otro joven pálido, pero de mayor musculatura, mas alto y de cabello un poco alborotado, su otro hermano llamado Drake.
- Deja en paz a Dafne, Francis…se que estuviste aquí todo el tiempo en la puerta para hacerle esa travesura…
- ¡Lo sabia! ¡maldito seas Francis!- aclamó Dafne.
- ¡Jejejejeje!- seguió riendose Francis.
Drake era la razón de por que las orejas de Francis estaban puntiagudas, cuando el hacia una maldad este le daba un correctivo severo.
Dafne dejó su portafolio en un escritorio cerca de las escaleras, de las cuales bajaba un hombre tan joven que pareciera que fuese otro hermano mayor de Dafne, pero se trataba de su padre, Flannagan, un hombre delgado de cabellera negra y un color de piel igual a la de sus hijos mayores.
- ¿Cómo te fue en la escuela hija?-
- Pues…bien…-
Ella oculto su encuentro con su nuevo compañero de clases a su padre, ambos caminaban hacia donde estaban el dúo de hermanos que se la pasaban discutiendo por la entrada de la puerta. Dafne pudo notar que su familia estaba vestida de negro, su padre usaba una gabardina negra con un traje de gala y pantalones negro con unos zapatos recién pulidos. Y sus hermanos, Drake usaba una camisa negra con cuello de tortuga y pantalones de mezclilla del mismo color; y Francis….era Francis, una camisa negra que decía en la espalda “amo a los venados”, pantalones de mezclilla negros con algunos parches cosidos que tenían frases como “viva la violencia” y “fastidien el mundo” con letras florecentes y unos tenis blancos.
- ¿Irán de caza esta noche?- preguntó Dafne.
- Sí…- contesto su padre- Sabes muy bien que esta ropa negra nos sirve para que no nos vean…-
- Aunque uno de nosotros no entendió el concepto…- menciono Drake mirando a Francis.
- ¿Me hablas a mi?- respondió el susodicho.
- Ah…entonces…cuídense… ¡y cuiden a Francis!-
Decía la chica despidiéndose de su familia, a lo que solo su padre le dio una despedida con un beso y una sonrisa. Después los tres se marcharon, corriendo como si fueran unos gatos, trepándose por los árboles y desapareciendo en las sombras; todo eso en unos instantes dejando a Dafne en la misma posición en la que estaba. Ella dio un suspiro y camino a la cocina, donde abrió el refrigerador que estaba repleto de muchos vegetales y fruta fresca. Busco una naranja y se la llevó a la mesa.
Volvió a suspirar y acaricio la naranja cuidadosamente, después le dio un beso en una zona que exploro con sus dedos y por ultimo, le dio un mordisco reluciendo unos colmillos que se incrustaban en la naranja y saca todo el jugo hasta dejarla vacía.
Capitulo 1: Cesar
- A veces pienso que no soy yo misma cuando huelo la sangre…también pienso que puedo arriesgar la vida de mis amigos de mi escuela… ¿habrá alguien quien tenga la misma carga que yo?
Se decía Dafne todas las mañanas cuando iba a la escuela, su vida es social como cualquier estudiante, aunque nunca iba a fiestas o bailes. En especial cuando la invitan a una carne azada, ella se rehúsa rotundamente a participar. Sus compañeros se preocupaban al ver como ella reacciona cuando ve a alguien comer carne, le llegaban unos mareos tremendos e incluso se retira al baño o al patio para relajarse.
Era un caluroso día de verano cuando la vida de Dafne y su familia sufrirían un gran cambio. Su maestra de literatura, una señora bajita de buen corazón, anunció la llegada de un nuevo alumno; el estudiante se suponía que iba llegar a la clase de dicha maestra, pero nunca llego. Al pasar la siguiente clase, Física, la cual era impartida por un maestro delgado con lentes y de mal humor; un joven entro al salón, con la fachada de maleante y anoto su nombre en el pizarrón sin el permiso del maestro.
- Mi nombre es Cesar… ¡y al quien no le interesa mejor ni se meta conmigo!-
Decía el chico con un acento español, mientras golpeaba el escritorio del maestro con autoridad, su apariencia era vulgar, con una chaqueta negra rota en los codos, una camisa blanca sucia con lodo, su rostro cubierto de tierra y grasosa; cabello alborotado con enormes patillas que cubren sus mejillas. Muchos se asustaban al ver como se comportaba el joven, a excepción del maestro, Dafne, el representante del salón y el típico chico alto y fornido del salón que nada le intimida.
Al llegar la maestra de literatura, antes de que empezara una guerra en el salón, explicó que Cesar es su nuevo compañero. Nadie se imaginaba a tal personaje como su nuevo compañero, el cual empezó a escupir en el suelo tratando de atinar al cesto de basura. Se sentó en un pupitre vació que se ubicaba a lado de la ventana de la cuarta fila horizontal a dos pupitres lejos de Dafne.
Dafne observaba al chico y se fijaba en sus rasgos, notaba que su aspecto no era el de un humano normal, más bien como si fuera un animal. También por su expresión, mientras miraba por la ventana, podía compararse con la de un animal enjaulado.
Más tarde Cesar se escapó de la clase de Educación física, mientras todos se ponían hacer ejercicio como soldados preparándose para una posible tercera Guerra Mundial. Era donde todos daban su opinión sobre el nuevo chico sin que él escuchara.
Todos empezaron con un mal comentario en especial el representante quien suponía que Cesar era un expulsado de otra escuela por su comportamiento. Otro suponía que Cesar fue expulsado de su país, una alumna decía que Cesar era horrendo, mientras otra alumna expresaba lo malo de su aspecto físico y Dafne dio el comentario final.
- Mientras que no se junte con nosotros esta bien…-
Solo lo dijo para estar de acuerdo con sus compañeros.
Después de educación física, Dafne salió primero del gimnasio y al caminar distraída se encontró con Cesar, quien frunció el seño delante de ella. Notó lo alto que era, al menos la rebasaba por una cabeza, y con timidez escuchó como él hacia un gruñido bestial entre sus dientes.
-… ¡Hola…Cesar!-
Cesar no le dirigió la palabra y se fue a otro rumbo. Era como si el hubiera escuchado lo que ella y los demás dijeron en sus espaldas. De regreso al salón, ella deseaba regresar a su casa pronto, el comportamiento de Cesar la ponía nerviosa y ver como él observaba al resto de la clase con la misma mirada de odio que le dirigía a ella. Todos guardaban su distancia ante él, excepto una alumna de facciones muy delicadas y elegantes, el cabello tan negro como el carbón, liso y largo como las cascadas y sus ojos tan brillantes como perlas, como su nombre.
Perla era la única que no se alejaba de él, incluso acepto el trato de intercambiar su lugar con otro compañero que estaba atrás de Cesar. Dafne no le importo la cercanía entre Perla y Cesar por un tiempo, hasta que por fin llegó la hora de la salida. Con un gran apuro de salir, Dafne logro salir fuera de la escuela hasta tomar un autobús que la llevaría a su casa. Monterrey era una ciudad ubicada en estado de Nuevo León al norte de México, era una ciudad enorme que cada vez crecía mas infestada también de mucho trafico por lo que era tardado viajar de un lugar a otro. Llegando a su dulce hogar, la chica contempló su lujosa fachada de arte contemporáneo, con grandes ventanales; llegó a la puerta donde fue recibida por un golpe de la perilla.
-Ups…¡¡perdón hermanita!!...-
Decía un chico delgado con el cabello negro con una cola de caballo cerca de su patilla derecha, piel pálida y orejas puntiagudas. Se reía del infortunio de su hermana menor que se despegaba de la puerta con furia. En eso, el joven burlón siente un fuerte estirón de orejas de parte otro joven pálido, pero de mayor musculatura, mas alto y de cabello un poco alborotado, su otro hermano llamado Drake.
- Deja en paz a Dafne, Francis…se que estuviste aquí todo el tiempo en la puerta para hacerle esa travesura…
- ¡Lo sabia! ¡maldito seas Francis!- aclamó Dafne.
- ¡Jejejejeje!- seguió riendose Francis.
Drake era la razón de por que las orejas de Francis estaban puntiagudas, cuando el hacia una maldad este le daba un correctivo severo.
Dafne dejó su portafolio en un escritorio cerca de las escaleras, de las cuales bajaba un hombre tan joven que pareciera que fuese otro hermano mayor de Dafne, pero se trataba de su padre, Flannagan, un hombre delgado de cabellera negra y un color de piel igual a la de sus hijos mayores.
- ¿Cómo te fue en la escuela hija?-
- Pues…bien…-
Ella oculto su encuentro con su nuevo compañero de clases a su padre, ambos caminaban hacia donde estaban el dúo de hermanos que se la pasaban discutiendo por la entrada de la puerta. Dafne pudo notar que su familia estaba vestida de negro, su padre usaba una gabardina negra con un traje de gala y pantalones negro con unos zapatos recién pulidos. Y sus hermanos, Drake usaba una camisa negra con cuello de tortuga y pantalones de mezclilla del mismo color; y Francis….era Francis, una camisa negra que decía en la espalda “amo a los venados”, pantalones de mezclilla negros con algunos parches cosidos que tenían frases como “viva la violencia” y “fastidien el mundo” con letras florecentes y unos tenis blancos.
- ¿Irán de caza esta noche?- preguntó Dafne.
- Sí…- contesto su padre- Sabes muy bien que esta ropa negra nos sirve para que no nos vean…-
- Aunque uno de nosotros no entendió el concepto…- menciono Drake mirando a Francis.
- ¿Me hablas a mi?- respondió el susodicho.
- Ah…entonces…cuídense… ¡y cuiden a Francis!-
Decía la chica despidiéndose de su familia, a lo que solo su padre le dio una despedida con un beso y una sonrisa. Después los tres se marcharon, corriendo como si fueran unos gatos, trepándose por los árboles y desapareciendo en las sombras; todo eso en unos instantes dejando a Dafne en la misma posición en la que estaba. Ella dio un suspiro y camino a la cocina, donde abrió el refrigerador que estaba repleto de muchos vegetales y fruta fresca. Busco una naranja y se la llevó a la mesa.
Volvió a suspirar y acaricio la naranja cuidadosamente, después le dio un beso en una zona que exploro con sus dedos y por ultimo, le dio un mordisco reluciendo unos colmillos que se incrustaban en la naranja y saca todo el jugo hasta dejarla vacía.
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
Wiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii! K emocion, a ver si esta ves puedo seguir la continuidad de esta historia. Me alegra volverla a leer! Y seguro a la familia les gusta tambien! espero pronto el next capi! X3!!!!
Saludos!
soy la primera en comentar y Viva Francissss XDDDDDDDDD!!!!!
Saludos!
soy la primera en comentar y Viva Francissss XDDDDDDDDD!!!!!
la historia esta genial!
ola maestro!
esta genial! me encanta como es francis! es hiperactivo!
no hay nada mejor que eso!
xD y tambien me agrada el personaje de dafne
sale les dire que vengan a leer esto!
jane vulturi^^ team francis
esta genial! me encanta como es francis! es hiperactivo!
no hay nada mejor que eso!
xD y tambien me agrada el personaje de dafne
sale les dire que vengan a leer esto!
jane vulturi^^ team francis
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
Yo tambien quieor ser del team francis! fui su primera fan hace tiempo! esperen a verlo dibujado por aro xD, tiene los diseños de todos sus personajes, jiji, ya conoceran al resto!
TEAM FRANCIS!
TEAM FRANCIS!
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
anda la osa!!!!!!! esta genial!!!! sube pronto otro capitulo aro!!! lo esperamos
Renesmee Pattz- Admin
- Mensajes : 35
Fecha de inscripción : 09/01/2009
Edad : 29
Localización : que se yo
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
wow Aro q buena historia
ash... continua!!!!continua!!!
me qd super pikda jejeje siiii!!!!!
bueno si quieres vale q buena historia jejeje
ya bye!!!
ash... continua!!!!continua!!!
me qd super pikda jejeje siiii!!!!!
bueno si quieres vale q buena historia jejeje
ya bye!!!
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
bueno, para no dejarlos en espera...aqui dejo la segunda parte
Por la noche su familia salía a cazar por el cerro y buscaban algunos animales para beber su sangre; Francis logró alcanzar un venado y lo derribó al suelo, Drake al ver que no encontró nada para él, logra morder el venado que atrapo su hermano clavando sus afilados colmillos sobre el cuello del vanado; a Francis no le molesta compartir su presa, pero le molesta que Drake absorba muy rápido la sangre del animal.
Dafne sale de la cocina después de cenar la naranja, recoge su mochila y comienza a sacar unos libros, cualquier chica se molestaría en hacer su tarea, pero ella no. Entró a su habitación, un cuarto repleto de póster de una banda de música y un escritorio y una silla. Solo se alcanzaba a ver una cama tendida y al parecer sin usar; pero ella la usaba por si le dan ganas de escribir sobre ella; pero decide hacer su tarea en el escritorio. A continuación lo que hace Dafne durante la noche:
Hace su tarea para el día siguiente y avanza la que tiene que entregar otro día. Después de hacer eso, decide cambiarse de ropa a una más cómoda y se sienta a ver la televisión, sin sus hermanos cerca podía ver los programas que ella quisiera. Podía mirar programas de televisión y películas que otros chicos desearían ver en la medianoche, pero ella se conformo con ver un documental que quería ver sobre los pájaros y la repetición era muy noche.
Disfrutaba su ventaja de estar despierta, todo el día y la noche sin dormir. Esperaba que amaneciera para poder arreglarse e ir a la aburrida escuela; llego la hora en que salían los primeros rayos de sol y se baño. Cuando estaba en la ducha, su padre y sus hermanos habían regresado, con la ropa manchada de sangre, los dos hermanos decidieron ir a cambiarse antes de que Dafne detectara esa aroma.
Al estar lista para ir a la escuela, como todos los días ve a sus hermanos para ir al trabajo. Drake es fotógrafo de una revista, teniendo la ventaja de ir a donde el quiera, llevando consigo una cámara con una enorme lente guardada en un portafolio y una cámara digital colgada en su cuello con un correa azul. Mientras que Francis se pone una botarga de gallina para un restauran de pollo frito. Su padre es maestro de literatura en una universidad y salio más temprano que sus hijos con el cabello más recogido y con un traje de color claro acompañado por una corbata azul con un bordado de un escudo dorado y una cruz roja.
Unos momentos más tarde Dafne llegó a su escuela gracias a Drake, que tiene un auto Hibrido rojo, claro que fueron acompañados por Francis que iba con su disfraz puesto.
- ¡Cuídate!...hoy si podré ir por ti en la salida… - se despidió Drake sin soltar el volante y vigilando a su hermana mientras salía del auto.
- Pooo poo pooo…poooo poo…- fue lo único que dijo Francis aprovechando su disfraz de pollo.
Ella solamente ignoró a Francis disfrazado de pollo en la parte de atrás del coche. Entró al edificio, y con unos elegantes pasos entró directo al salón y a su pupitre. No había muchos alumnos tan temprano en el salón, y mientras comenzaban las clases, ella sacó un pequeño libro de poesía y le dio una leída antes de empezar la clase. Al leer la primera poesía, notó que alguien se acercaba, se trataba del representante del salón, Malcom, quien mostró una sonrisa a Dafne.
- ¡Buenos días Dafne!-
- ¡Buenos días Malcom!- respondió con una gran sonrisa de oreja a oreja.
- Me entere que chocaste con Cesar después de educación Física… ¿no te dijo nada?- Malcom cambió su sonrisa por un rostro de preocupación.
- No se podría decir que me dijo algo…- Dafne suspiró.
Malcom no entendió lo que dijo Dafne que después dio un respiro.
- Esta bien…si te hace algo tu solo dime… ¿ok?-
- Si… ¡muchas gracias!- le respondió con una sonrisa.
El representante retrocedió, para Dafne él parecía apuesto, si tan solo se quitara los lentes y mostrara un peinado más rebelde.
Cunado comenzaba de nuevo con su lectura, notó otra presencia que se acercaba; era como si nadie quería que ella leyera ese día; era un chico alto y fornido, el típico boxeador de peso ligero con el cabello corto y castaño.
- ¡Hola Daf!- saludo Fred.
- ¡Hola Fred!- lo miró atentamente-...Dios mió… ¿Qué te paso?- señaló una herida que estaba en la mejilla del chico, era de un golpe muy fuerte.
- …Ah esto… - tocó su mejilla lastimada con una sonrisa de tonto- fueron los de tercer año…pero descuida, no participe en la pelea…-
- Ufff…menos mal-
Fred era antes un bravucón e incluso lo suspendían muy seguido, pero ahora se dedicaba a ser un mejor alumno para mantener un empleo y ayudar a su familia. Este chico también le atraía a Dafne, pero no sabía si fuese buena idea estar casada con un boxeador. Al platicar un poco con Fred, vio que Perla esta sentada en el pupitre de atrás de Cesar, con la mirada perdida y esperando impacientemente.
Comenzó la clase, como era un día diferente al de ayer les tocaba una clase distinta, llego su maestro de algebra y notó la presencia de un chico que entro empujándolo de la entrada. Era Cesar quien sin pedir permiso entro al salón con una libreta maltratada y una pluma. Se sentó mientras que el maestro ignoraba lo sucedido y comenzaba a tomar lista. Perla ahora estaba mas tranquila, miraba a Cesar cuidadosamente, mientras que él miraba por la ventana al igual que el día anterior.
Pasaron las clases y Perla aun miraba a Cesar, era difícil para ella poner atención a las clases y mirar al chico a la vez.
De pronto ella dejó caer por accidente su lápiz al suelo y el objeto rodó hacia la silla de Cesar. Se sintió avergonzada y nerviosa, no quería agacharse y recupéralo; era mucha la distancia como para que lo pudiera tratar de alcanzar con los pies. Pero en ese instante ante su sorpresa una mano recogió el lápiz y se giró hacia ella.
- Aquí tienes…- Cesar extendió su mano derecha hacia ella para devolverle el lápiz.
Perla, enmudecida, no pudo evitar sonrojarse apenada.
- ¿Es tu lápiz, no?- preguntó Cesar gruñendo algo impaciente.
- Eh…si… ¡gracias!- tomando el lápiz, Perla se volteó avergonzado a otro lado que no fuera hacia Cesar.
Al finalizar la clase, Perla miró la espalda de Cesar por un momento, antes de que llegara el siguiente maestro, los alumnos tenían 5 minutos de un leve descanso. Ella quería entablar una conversación con él, pero ante su pesar su voz se quedaba muda al tratar de decir “hola”. Pasaron los 5 minutos y el maestro que impartía la clase de Química llegó puntual con un televisor del club de audiovisual, en el cual había colocando un video sobre los elementos de la tabla periódica; así Perla perdió su oportunidad de hablar con Cesar.
Por la noche su familia salía a cazar por el cerro y buscaban algunos animales para beber su sangre; Francis logró alcanzar un venado y lo derribó al suelo, Drake al ver que no encontró nada para él, logra morder el venado que atrapo su hermano clavando sus afilados colmillos sobre el cuello del vanado; a Francis no le molesta compartir su presa, pero le molesta que Drake absorba muy rápido la sangre del animal.
Dafne sale de la cocina después de cenar la naranja, recoge su mochila y comienza a sacar unos libros, cualquier chica se molestaría en hacer su tarea, pero ella no. Entró a su habitación, un cuarto repleto de póster de una banda de música y un escritorio y una silla. Solo se alcanzaba a ver una cama tendida y al parecer sin usar; pero ella la usaba por si le dan ganas de escribir sobre ella; pero decide hacer su tarea en el escritorio. A continuación lo que hace Dafne durante la noche:
Hace su tarea para el día siguiente y avanza la que tiene que entregar otro día. Después de hacer eso, decide cambiarse de ropa a una más cómoda y se sienta a ver la televisión, sin sus hermanos cerca podía ver los programas que ella quisiera. Podía mirar programas de televisión y películas que otros chicos desearían ver en la medianoche, pero ella se conformo con ver un documental que quería ver sobre los pájaros y la repetición era muy noche.
Disfrutaba su ventaja de estar despierta, todo el día y la noche sin dormir. Esperaba que amaneciera para poder arreglarse e ir a la aburrida escuela; llego la hora en que salían los primeros rayos de sol y se baño. Cuando estaba en la ducha, su padre y sus hermanos habían regresado, con la ropa manchada de sangre, los dos hermanos decidieron ir a cambiarse antes de que Dafne detectara esa aroma.
Al estar lista para ir a la escuela, como todos los días ve a sus hermanos para ir al trabajo. Drake es fotógrafo de una revista, teniendo la ventaja de ir a donde el quiera, llevando consigo una cámara con una enorme lente guardada en un portafolio y una cámara digital colgada en su cuello con un correa azul. Mientras que Francis se pone una botarga de gallina para un restauran de pollo frito. Su padre es maestro de literatura en una universidad y salio más temprano que sus hijos con el cabello más recogido y con un traje de color claro acompañado por una corbata azul con un bordado de un escudo dorado y una cruz roja.
Unos momentos más tarde Dafne llegó a su escuela gracias a Drake, que tiene un auto Hibrido rojo, claro que fueron acompañados por Francis que iba con su disfraz puesto.
- ¡Cuídate!...hoy si podré ir por ti en la salida… - se despidió Drake sin soltar el volante y vigilando a su hermana mientras salía del auto.
- Pooo poo pooo…poooo poo…- fue lo único que dijo Francis aprovechando su disfraz de pollo.
Ella solamente ignoró a Francis disfrazado de pollo en la parte de atrás del coche. Entró al edificio, y con unos elegantes pasos entró directo al salón y a su pupitre. No había muchos alumnos tan temprano en el salón, y mientras comenzaban las clases, ella sacó un pequeño libro de poesía y le dio una leída antes de empezar la clase. Al leer la primera poesía, notó que alguien se acercaba, se trataba del representante del salón, Malcom, quien mostró una sonrisa a Dafne.
- ¡Buenos días Dafne!-
- ¡Buenos días Malcom!- respondió con una gran sonrisa de oreja a oreja.
- Me entere que chocaste con Cesar después de educación Física… ¿no te dijo nada?- Malcom cambió su sonrisa por un rostro de preocupación.
- No se podría decir que me dijo algo…- Dafne suspiró.
Malcom no entendió lo que dijo Dafne que después dio un respiro.
- Esta bien…si te hace algo tu solo dime… ¿ok?-
- Si… ¡muchas gracias!- le respondió con una sonrisa.
El representante retrocedió, para Dafne él parecía apuesto, si tan solo se quitara los lentes y mostrara un peinado más rebelde.
Cunado comenzaba de nuevo con su lectura, notó otra presencia que se acercaba; era como si nadie quería que ella leyera ese día; era un chico alto y fornido, el típico boxeador de peso ligero con el cabello corto y castaño.
- ¡Hola Daf!- saludo Fred.
- ¡Hola Fred!- lo miró atentamente-...Dios mió… ¿Qué te paso?- señaló una herida que estaba en la mejilla del chico, era de un golpe muy fuerte.
- …Ah esto… - tocó su mejilla lastimada con una sonrisa de tonto- fueron los de tercer año…pero descuida, no participe en la pelea…-
- Ufff…menos mal-
Fred era antes un bravucón e incluso lo suspendían muy seguido, pero ahora se dedicaba a ser un mejor alumno para mantener un empleo y ayudar a su familia. Este chico también le atraía a Dafne, pero no sabía si fuese buena idea estar casada con un boxeador. Al platicar un poco con Fred, vio que Perla esta sentada en el pupitre de atrás de Cesar, con la mirada perdida y esperando impacientemente.
Comenzó la clase, como era un día diferente al de ayer les tocaba una clase distinta, llego su maestro de algebra y notó la presencia de un chico que entro empujándolo de la entrada. Era Cesar quien sin pedir permiso entro al salón con una libreta maltratada y una pluma. Se sentó mientras que el maestro ignoraba lo sucedido y comenzaba a tomar lista. Perla ahora estaba mas tranquila, miraba a Cesar cuidadosamente, mientras que él miraba por la ventana al igual que el día anterior.
Pasaron las clases y Perla aun miraba a Cesar, era difícil para ella poner atención a las clases y mirar al chico a la vez.
De pronto ella dejó caer por accidente su lápiz al suelo y el objeto rodó hacia la silla de Cesar. Se sintió avergonzada y nerviosa, no quería agacharse y recupéralo; era mucha la distancia como para que lo pudiera tratar de alcanzar con los pies. Pero en ese instante ante su sorpresa una mano recogió el lápiz y se giró hacia ella.
- Aquí tienes…- Cesar extendió su mano derecha hacia ella para devolverle el lápiz.
Perla, enmudecida, no pudo evitar sonrojarse apenada.
- ¿Es tu lápiz, no?- preguntó Cesar gruñendo algo impaciente.
- Eh…si… ¡gracias!- tomando el lápiz, Perla se volteó avergonzado a otro lado que no fuera hacia Cesar.
Al finalizar la clase, Perla miró la espalda de Cesar por un momento, antes de que llegara el siguiente maestro, los alumnos tenían 5 minutos de un leve descanso. Ella quería entablar una conversación con él, pero ante su pesar su voz se quedaba muda al tratar de decir “hola”. Pasaron los 5 minutos y el maestro que impartía la clase de Química llegó puntual con un televisor del club de audiovisual, en el cual había colocando un video sobre los elementos de la tabla periódica; así Perla perdió su oportunidad de hablar con Cesar.
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
ash!!!! osea ya me habia quedado picada de nuevo...quiero mas, más , más, tengo sed...de más jejejeje eres muy bueno Aro muy muy bueno escribiendo
bueno espero pronto escribas más y que estes bien cuidate bye!!!
vampire kisses!!!
bueno espero pronto escribas más y que estes bien cuidate bye!!!
vampire kisses!!!
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
bueno, aqui dejo el trozo del capitulo 1, esperoque me dejen muchos comentarios para continuar escribiendo
La clase de Inglés era la siguiente, y su maestra era un de los maestros que llegaban más temprano que los demás; Perla insistió en dar una conversación con Cesar por lo menos en los 3 minutos restantes, pero sus ánimos se lo impedían. Entonces la maestra llegó, y otra oportunidad de hablar con Cesar se perdió para ella. Al finalizar la clase tenían un receso de 20 minutos, Perla se quedó sentada en su asiento, mientras los demás alumnos se iban a la cafetería o comer en los patios de la escuela el almuerzo que traían desde sus casas.
Ella miraba la espalda de Cesar, sentado frente a ella, y que parecía no tenía intenciones de salir, finalmente la chica solo suspiro y tomo la decisión de levantarse para ir a comer su almuerzo. Se detuvo en la puerta, para mirar una vez más a Cesar que aun estaba sentado y cuando iba a salir chocó sin fijarse con otro chico menor que Cesar, vestido con mal aspecto, este se comporto grosero y le empezó a gritar a Perla.
- ¡Oye!... ¿por que no te fijas por donde caminas?- se mostró amenazador ante ella.
- Pe...pe…- Perla tartamudeaba tratando de disculparse con temor, mientras que el chico la seguía mirando.
- ¿Me estas llamando pend…?-
Perla intentaba pedir perdón, y el chico se molesto más con Perla pensando en que ella lo intentaba insultar. Pero antes de terminar su pregunta, Cesar se interpuso entre Perla y el chico, y enfadado dirigido una mirada y en una mueca mostró unos extraños colmillos que asustaron al muchacho que al instante decidió retirarse sin decir nada. Mientras que Perla se quedó paralizada y asustada al presenciar la escena recién ocurrida.
- ¿Estas bien?- Cesar se giró hacia ella mostrando ahora la expresión normal de su rostro.
Perla quedó asombrada, no sabia que decir ante el chico que era más alto que ella siendo tan enana.
- ¿Siempre estas muda?...o ¿estas resfriada?- Cesar adoptó el mismo comportamiento que había mostrado el otro chico, gritándole sin razón y exaltando a la pobre Perla ante el cambio brusco de actitud.
- ….No…digo…es que…yo… - ella mantuvo su mirada baja tratando de hablar sintiendo como si su lengua estuviera dormida.
- Debes tener mas valor para hablar, sino otro chico como ese te va molestar – le dijo tratando de calmarse.
- Si…gracias… ¡muchas gracias! – Perla respondió apenada pero aun no se atreve a dar la cara con todo su rostro enrojecido.
Cesar suspiró con los ojos entrecerrados y dirigió su vista hacia abajo)
- Si quieres… ¿conversamos en le descanso?...Así te ayudaría hablar más con las personas…-
La chica se quedó roja como un tomate hasta las orejas, y más muda que nunca, ya no sabia que contestarle a Cesar y este se sentía cada vez más impaciente en esperar la respuesta.
- ¿Vas a decir que sí o que?... ¡responde rápido!- le gritó enfadado viendo que no hay mas remedio para hacer que ella hablara.
- Eh…si… ¡si quiero platicar contigo!- ella respondió al momento que Cesar le grito, este sonrió al escuchar por fin un enunciado completo de la boca de Perla.
Ambos fueron a conversar al patio y Perla se notó diferente al hablar con un chico, algunas alumnas que miraban a la extraña pareja, se sorprendían al ver como perla movía su boca para platicar, ya que ella para sus compañeros era muy reservada y nunca entablaba una conversación al menos que se lo digan.
Un rato después termino el descanso y ambos regresaron al salón aun conversando, la que quedó mas sorprendida fue Dafne quien miraba a la mencionada pareja que se sentaban perfectamente en sus asientos antes de que empezara. Al finalizar las clases, Perla y Cesar conversaron otra vez, pero ahora Cesar se comportaba extraño, como si algo le empezaba a caer mal.
Perla apoyó su mano en el hombro de Cesar preocupada.
-… ¿Estas bien?- le preguntó con un tono suave y miró como los ojos de este cambian.
- Estoy bien… ¿te parece si platicamos después?- le respondió con una voz ronca e intentando soltar un gruñido y Perla le soltó el hombro.
-…Esta bien… ¡nos vemos mañana!- se despidió algo decepcionada al ver que no alcanzaría a tener mas conversación con él.
Dafne salió de su salón primero que Cesar, y se encontraba caminado hacia donde estaba la salida. Busco con la mirada el lugar donde se había estacionado su hermano y cuando lo vio rápidamente se dirigió al coche. Al abrir la puerta del copiloto, ella noto que su hermano Drake estaba muy serio y concentrado sobre el volante del auto.
- ¿Estas bien?- le pregunto Dafne al ver como su hermano Drake estaba apunto de romper el volante con sus poderosas manos, mientras ella se sentaba en el lugar del copiloto.
- ¡Estoy bien!- le contesto tratando de calmarse- vamos a casa…-
Drake comenzó a conducir el auto asegurándose que su hermana llevara puesto el cinturón de seguridad. Llegando a la casa, Drake bajó con el ánimo de siempre, al parecer lo que lo molestaba había dejado de hacerlo; pero no pronuncio ninguna palabra y fue a ver su padre Flannagan. Francis no estaba en la casa, iba trabajar tiempo extra con su disfraz de pollo; pero Dafne se preocupó al ver como Drake subía por las escaleras con mucha velocidad hasta llegar al estudio de su padre y resonaba la puerta con su puño.
- Puedes pasar…- Flannagan contestó al llamado de Drake mientras leía un libro de notas en su escritorio. Drake entró y cerró la puerta de inmediato; su padre detectó la preocupación de su hijo y cerró el libro que leía estando a punto de preguntar que era lo que había pasado.
- ¡Detecte a uno!- la expresión del rostro de Drake cambió al hablarle a su padre sobre lo ocurrido.
- ¿A uno…uno que?- Flannagan lo miró interrogante sosteniendo firmemente su libro.
Drake miraba seriamente a su padre y Flannagan detectó como los ojos de su hijo se tornaban de un color rojo oscuro. Se levanto del escritorio y miro por la ventana para decir lo siguiente.
-¿Dónde lo detectaste?- entendiendo ahora lo que su hijo le trataba de decir.
- En el instituto donde estudia Dafne-
- ¿Crees que sea peligroso?- Flannagan se acomodó sobre la ventana vigilando sobre las copas de los árboles.
- No detecte ninguna agresividad…pero creo que Dafne ya no debe ir a ese lugar…-
- No…yo mismo iré mañana para inspeccionar si es peligroso para ella-
- Padre…mejor voy con Francis y que Dafne se quede aquí…- dijo Drake preocupado.
Flannagan le dirige una señal para que se calme con la mano.
- No…no quiero que ella se entere…además…- nuevamente se sentó sobre el escritorio- por mi experiencia no me detectara a mi con facilidad, la situación se empeorara si tu o Francis vienen.-
La clase de Inglés era la siguiente, y su maestra era un de los maestros que llegaban más temprano que los demás; Perla insistió en dar una conversación con Cesar por lo menos en los 3 minutos restantes, pero sus ánimos se lo impedían. Entonces la maestra llegó, y otra oportunidad de hablar con Cesar se perdió para ella. Al finalizar la clase tenían un receso de 20 minutos, Perla se quedó sentada en su asiento, mientras los demás alumnos se iban a la cafetería o comer en los patios de la escuela el almuerzo que traían desde sus casas.
Ella miraba la espalda de Cesar, sentado frente a ella, y que parecía no tenía intenciones de salir, finalmente la chica solo suspiro y tomo la decisión de levantarse para ir a comer su almuerzo. Se detuvo en la puerta, para mirar una vez más a Cesar que aun estaba sentado y cuando iba a salir chocó sin fijarse con otro chico menor que Cesar, vestido con mal aspecto, este se comporto grosero y le empezó a gritar a Perla.
- ¡Oye!... ¿por que no te fijas por donde caminas?- se mostró amenazador ante ella.
- Pe...pe…- Perla tartamudeaba tratando de disculparse con temor, mientras que el chico la seguía mirando.
- ¿Me estas llamando pend…?-
Perla intentaba pedir perdón, y el chico se molesto más con Perla pensando en que ella lo intentaba insultar. Pero antes de terminar su pregunta, Cesar se interpuso entre Perla y el chico, y enfadado dirigido una mirada y en una mueca mostró unos extraños colmillos que asustaron al muchacho que al instante decidió retirarse sin decir nada. Mientras que Perla se quedó paralizada y asustada al presenciar la escena recién ocurrida.
- ¿Estas bien?- Cesar se giró hacia ella mostrando ahora la expresión normal de su rostro.
Perla quedó asombrada, no sabia que decir ante el chico que era más alto que ella siendo tan enana.
- ¿Siempre estas muda?...o ¿estas resfriada?- Cesar adoptó el mismo comportamiento que había mostrado el otro chico, gritándole sin razón y exaltando a la pobre Perla ante el cambio brusco de actitud.
- ….No…digo…es que…yo… - ella mantuvo su mirada baja tratando de hablar sintiendo como si su lengua estuviera dormida.
- Debes tener mas valor para hablar, sino otro chico como ese te va molestar – le dijo tratando de calmarse.
- Si…gracias… ¡muchas gracias! – Perla respondió apenada pero aun no se atreve a dar la cara con todo su rostro enrojecido.
Cesar suspiró con los ojos entrecerrados y dirigió su vista hacia abajo)
- Si quieres… ¿conversamos en le descanso?...Así te ayudaría hablar más con las personas…-
La chica se quedó roja como un tomate hasta las orejas, y más muda que nunca, ya no sabia que contestarle a Cesar y este se sentía cada vez más impaciente en esperar la respuesta.
- ¿Vas a decir que sí o que?... ¡responde rápido!- le gritó enfadado viendo que no hay mas remedio para hacer que ella hablara.
- Eh…si… ¡si quiero platicar contigo!- ella respondió al momento que Cesar le grito, este sonrió al escuchar por fin un enunciado completo de la boca de Perla.
Ambos fueron a conversar al patio y Perla se notó diferente al hablar con un chico, algunas alumnas que miraban a la extraña pareja, se sorprendían al ver como perla movía su boca para platicar, ya que ella para sus compañeros era muy reservada y nunca entablaba una conversación al menos que se lo digan.
Un rato después termino el descanso y ambos regresaron al salón aun conversando, la que quedó mas sorprendida fue Dafne quien miraba a la mencionada pareja que se sentaban perfectamente en sus asientos antes de que empezara. Al finalizar las clases, Perla y Cesar conversaron otra vez, pero ahora Cesar se comportaba extraño, como si algo le empezaba a caer mal.
Perla apoyó su mano en el hombro de Cesar preocupada.
-… ¿Estas bien?- le preguntó con un tono suave y miró como los ojos de este cambian.
- Estoy bien… ¿te parece si platicamos después?- le respondió con una voz ronca e intentando soltar un gruñido y Perla le soltó el hombro.
-…Esta bien… ¡nos vemos mañana!- se despidió algo decepcionada al ver que no alcanzaría a tener mas conversación con él.
Dafne salió de su salón primero que Cesar, y se encontraba caminado hacia donde estaba la salida. Busco con la mirada el lugar donde se había estacionado su hermano y cuando lo vio rápidamente se dirigió al coche. Al abrir la puerta del copiloto, ella noto que su hermano Drake estaba muy serio y concentrado sobre el volante del auto.
- ¿Estas bien?- le pregunto Dafne al ver como su hermano Drake estaba apunto de romper el volante con sus poderosas manos, mientras ella se sentaba en el lugar del copiloto.
- ¡Estoy bien!- le contesto tratando de calmarse- vamos a casa…-
Drake comenzó a conducir el auto asegurándose que su hermana llevara puesto el cinturón de seguridad. Llegando a la casa, Drake bajó con el ánimo de siempre, al parecer lo que lo molestaba había dejado de hacerlo; pero no pronuncio ninguna palabra y fue a ver su padre Flannagan. Francis no estaba en la casa, iba trabajar tiempo extra con su disfraz de pollo; pero Dafne se preocupó al ver como Drake subía por las escaleras con mucha velocidad hasta llegar al estudio de su padre y resonaba la puerta con su puño.
- Puedes pasar…- Flannagan contestó al llamado de Drake mientras leía un libro de notas en su escritorio. Drake entró y cerró la puerta de inmediato; su padre detectó la preocupación de su hijo y cerró el libro que leía estando a punto de preguntar que era lo que había pasado.
- ¡Detecte a uno!- la expresión del rostro de Drake cambió al hablarle a su padre sobre lo ocurrido.
- ¿A uno…uno que?- Flannagan lo miró interrogante sosteniendo firmemente su libro.
Drake miraba seriamente a su padre y Flannagan detectó como los ojos de su hijo se tornaban de un color rojo oscuro. Se levanto del escritorio y miro por la ventana para decir lo siguiente.
-¿Dónde lo detectaste?- entendiendo ahora lo que su hijo le trataba de decir.
- En el instituto donde estudia Dafne-
- ¿Crees que sea peligroso?- Flannagan se acomodó sobre la ventana vigilando sobre las copas de los árboles.
- No detecte ninguna agresividad…pero creo que Dafne ya no debe ir a ese lugar…-
- No…yo mismo iré mañana para inspeccionar si es peligroso para ella-
- Padre…mejor voy con Francis y que Dafne se quede aquí…- dijo Drake preocupado.
Flannagan le dirige una señal para que se calme con la mano.
- No…no quiero que ella se entere…además…- nuevamente se sentó sobre el escritorio- por mi experiencia no me detectara a mi con facilidad, la situación se empeorara si tu o Francis vienen.-
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
Hay Aro desde ya quiero que subas mas, escribe please!!!!!
esq enserio me has dejado muy metida
en la historia, a ver si escribes más porfis
yo prometo postear
bueno me voy
vampire kisses!!
esq enserio me has dejado muy metida
en la historia, a ver si escribes más porfis
yo prometo postear
bueno me voy
vampire kisses!!
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
Wiiii, ya sabe socmo me encanta esta historiaaaaaa!!! tienes k seguirla xD y dejar tan deslumbrados a la familai como me deslumbraste a mic on la historia. Se vuelve adictiva y emocionante, creanme xD!
Saludos Aro!
Francis team!!!!!! (que me perdone garret por ser fan de otro vampiro xD)
Saludos Aro!
Francis team!!!!!! (que me perdone garret por ser fan de otro vampiro xD)
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
bien, viendo que aunque sea un comentario y espero mas >w<
Entre manadas y clanes
Capitulo 2: El clásico
Amanse en la ciudad con un saludo del sol saliendo en el horizonte del contorno de un cerro en forma de silla de montar. La estela de luz entra en la ventana de la habitación de Dafne quien se pone una camisa de rayas azules y blancas con un escudo con una “M” adentro.
-¡Hoy es el día!-decía ella con una sonrisa mientras recogía su portafolio.
Bajo por las escaleras solo para ver su hermano Drake que se encontraba esperándola para llevarla a la escuela. Su padre y Francis, ya habían salido temprano ese día. Llegaron a la escuela y ella logro notar que no era la única vestida con una camiseta de su equipo favorito ese día. También había de otro equipo, color amarilla con rayas azules y una marca de cerveza en la espalda acompañada con el nombre y el número del jugador.
Entro al salón para ver a muchos de sus compañeros en un buen estado de humor. Ya que este día es el “Clásico” de fútbol entre los Rayados de Monterrey y los Tigres de la Universidad. La maestra de literatura aviso que iba llegar tarde, dando una señal para sus alumnos que este día iba ser mejor. Y mejorara, su maestro de educación física, el Sr. Contreras; y su maestro de historia, el Arquitecto Segura; fieles seguidores a los dos equipos que jugaran hoy en la tarde, se pusieron de acuerdo de cancelar sus clases y que los alumnos salieran temprano…claro que con una tarea adicional.
Aprovechando su tiempo libre, Malcom reúne firmas para una visita para los alumnos al Museo de Historia en el Centro. Solo había reunido 4, pero tenia esperanzas que Dafne le firmara la escasa lista. Se acerco a ella interrumpiendo su lectura con de su libro de poesías y mostró una sonrisa.
-Dafne…-conversando con ella, y esta mirándolo fijamente hacia el- ¿puedes firmarme este permiso? Por favor…el maestro lo requiere para irnos al museo para la próxima semana.
-¡Esta bien!- acepto con una sonrisa mientras sujetaba la lista que Malcom le había pasado.
Ella firmo la hoja mientras el miraba con una mirada de pocos amigos al lugar donde Cesar y Perla conversaban tranquilamente.
-¿Crees que necesite su firma?- decía el, mientras ella ponía atención a la dirección de la mirada de Malcom.
-Mejor ve- dijo Dafne cuando agacho su rostro y cerro los ojos- ya no somos niños de primaria para jusgar a un alumno nuevo por su apariencia
Malcom quedo sorprendido al escuchar a Dafne así. Ignora el pensamiento de la chica que aun recuerda lo que dijo en la clase de educación física, Dafne se sentía mal por haber dicho: “Mientras que no se junte con nosotros esta bien”. Malcom dio un suspiro y espero que Dafne le devolviera la hoja para que fuera con Cesar y Perla. Dafne le dio ánimos desde lejos con la mirada, pero Cesar no mostró ningún interés en firmar. Al menos Perla firmo en la hoja. Malcom regreso a donde estaba Dafne y dio otro suspiro.
-No se pudo- apunto de llorar.
-Al menos ella te firmo- dándole ánimos con una sonrisa refriéndose a Perla quien firmo.
Malcom siguió reuniendo firmas hasta lograr las necesarias, tuvo que ir incluso a otros salones para conseguirlas. La clase de Física era aburrida para Cesar quien intentaba ponerle atención todo lo que podía, de repente siente una reacción como si fuera una descarga o mejor dicho una presencia. Rápidamente lo primero que hace es ver por la ventana, y ver fijamente a un árbol de tronco muy alto y grandes ramas. Perla se percata de que algo le pasa a Cesar y le toca el hombro con su lápiz.
-¿te pasa algo?- le pregunta con la voz mas baja pasable para que el maestro no les llame la atención.
-No, nada…pensé ver algo- le contesta con la misma tonada de voz y da un ultimo vistazo al árbol, ignorando lo que estaba atrás de ese.
Flannagan, estaba en ese árbol vigilando los movimientos de Cesar, vestido con un traje oscuro de camuflaje –Es listo…- pensó al dar un pequeño vistazo mas- no pensé que lograría detectarme…debo verlo mas de cerca.
Las clases siguieron hasta llegar la hora de salida temprano. Los alumnos salían deprisa para ir al estadio o un restauran mas cercano donde televisarían el partido en vivo. Dafne se animo acompañar a 3 de sus compañeras, llamadas Carla, Paty y Brenda a la casa de esta ultima para ver el partido por pago por evento. Al salir de la escuela por detrás del edificio notaron aun personaje muy curioso que bailaba en una farmacia.
Se trataba de un hombre que estaba disfrazado de un personaje de dicha farmacia, de un ancianito rechoncho igual que Santa Clous, solo que sin la barba. En la mascara solo tenia un gran bigote y cejas de color blanco, con los ojos redondos y negros, en cada una de sus orejas tenia tres cabellos curveados y una sonrisa risueña; vistiendo una bata de doctor blanca e intentaba bailar una canción de un grupo juvenil.
Las chicas se reían al ver como este bailaba y saludaba a la gente que pasaba; y Paty dio un saludo y un beso a dicho personaje disfrazado; quien le respondió de la misma manera al verla. Todas se burlaban amistosamente de Paty al hacer eso, admiraban al sujeto quien usaba la botarga enfrente de esa farmacia, quien bailaba graciosamente y con cuidado de no caerse, hasta pensaban que debería de trabajar de mascota de los dos equipos que iban a jugar hoy.
Dafne se ponía a reír hasta que noto que unos muchachos, quienes intentaban molestar a la botarga, corrían como bestias hacia su presa para derribarlo. En su intento, y con asombro de todos, la botarga seguía en pie como si nada, haciendo rebotar a los jóvenes quienes cayeron al piso.
-¡waw!- dijo Brenda quien quedo boquiabierta al igual que las demás.
Dafne miro fijamente al personaje quien saludaba a los jóvenes que cayeron y se alejaron mareados. Dafne se molesto, sus amigas se alejaron y ella les avisa que después las sigue. Se acerca al personaje quien al verla enojada decide ignorarla.
-¿Adonde vas…?- lo detiene con una sola mano en el hombro-Dr. Simi…o quiero decir…Doctor Francis
-¡Rayos!- se escuchaba una voz a través del disfraz-¿Cómo lo averiguaste?
-Un Botarga sin ser derribado por un grupo de jóvenes y estar aun parado como si nada…¿te parece normal?- le gritaba a su hermano ignorando a los farmacéuticos que miraban aterrados al enojo de la chica.
Le dio un puñetazo a la cara de la botarga, no golpeo el rostro de Francis, pero si lo entumeció un poco.
-¡Cuando te hacen eso…te tienes que caer!- lo regaño- o sabrán que …-miro a los de la farmacia y nuevamente miro a su hermano- …o sabrán lo que tu sabes que eres tu…-diciendo en voz baja
-¿Qué me gusta ver las faldas de las chicas?- exclamo en voz alta.
-¡Eso no, pervertido sin remedio!- le dio otro golpe con el puño-…¡oh cielos!- dijo sorprendida.
-¿Qué sucede?- pregunto con una gran ignorancia.
-¡Olvide mi celular en la escuela!-
-Y dicen que yo soy el distraído.
Dafne le dio otro golpe y se echo a correr de nuevo a la escuela por su celular. Dejando en el suelo a su hermano, acto que no hicieron los jóvenes al tratar de empujarlo. Ella ignoraba que pasaría al llegar a su escuela. Cesar estaba sentado junto con Perla en una pequeña barda de un metro de alto, perteneciente la fachada principal del instituto que estaba la calle desolada con algunos coches estacionados. Ella se asomaba cada 5 minutos para ver la cheyenne de su padre y hablaba con Cesar al mismo tiempo.
Entre manadas y clanes
Capitulo 2: El clásico
Amanse en la ciudad con un saludo del sol saliendo en el horizonte del contorno de un cerro en forma de silla de montar. La estela de luz entra en la ventana de la habitación de Dafne quien se pone una camisa de rayas azules y blancas con un escudo con una “M” adentro.
-¡Hoy es el día!-decía ella con una sonrisa mientras recogía su portafolio.
Bajo por las escaleras solo para ver su hermano Drake que se encontraba esperándola para llevarla a la escuela. Su padre y Francis, ya habían salido temprano ese día. Llegaron a la escuela y ella logro notar que no era la única vestida con una camiseta de su equipo favorito ese día. También había de otro equipo, color amarilla con rayas azules y una marca de cerveza en la espalda acompañada con el nombre y el número del jugador.
Entro al salón para ver a muchos de sus compañeros en un buen estado de humor. Ya que este día es el “Clásico” de fútbol entre los Rayados de Monterrey y los Tigres de la Universidad. La maestra de literatura aviso que iba llegar tarde, dando una señal para sus alumnos que este día iba ser mejor. Y mejorara, su maestro de educación física, el Sr. Contreras; y su maestro de historia, el Arquitecto Segura; fieles seguidores a los dos equipos que jugaran hoy en la tarde, se pusieron de acuerdo de cancelar sus clases y que los alumnos salieran temprano…claro que con una tarea adicional.
Aprovechando su tiempo libre, Malcom reúne firmas para una visita para los alumnos al Museo de Historia en el Centro. Solo había reunido 4, pero tenia esperanzas que Dafne le firmara la escasa lista. Se acerco a ella interrumpiendo su lectura con de su libro de poesías y mostró una sonrisa.
-Dafne…-conversando con ella, y esta mirándolo fijamente hacia el- ¿puedes firmarme este permiso? Por favor…el maestro lo requiere para irnos al museo para la próxima semana.
-¡Esta bien!- acepto con una sonrisa mientras sujetaba la lista que Malcom le había pasado.
Ella firmo la hoja mientras el miraba con una mirada de pocos amigos al lugar donde Cesar y Perla conversaban tranquilamente.
-¿Crees que necesite su firma?- decía el, mientras ella ponía atención a la dirección de la mirada de Malcom.
-Mejor ve- dijo Dafne cuando agacho su rostro y cerro los ojos- ya no somos niños de primaria para jusgar a un alumno nuevo por su apariencia
Malcom quedo sorprendido al escuchar a Dafne así. Ignora el pensamiento de la chica que aun recuerda lo que dijo en la clase de educación física, Dafne se sentía mal por haber dicho: “Mientras que no se junte con nosotros esta bien”. Malcom dio un suspiro y espero que Dafne le devolviera la hoja para que fuera con Cesar y Perla. Dafne le dio ánimos desde lejos con la mirada, pero Cesar no mostró ningún interés en firmar. Al menos Perla firmo en la hoja. Malcom regreso a donde estaba Dafne y dio otro suspiro.
-No se pudo- apunto de llorar.
-Al menos ella te firmo- dándole ánimos con una sonrisa refriéndose a Perla quien firmo.
Malcom siguió reuniendo firmas hasta lograr las necesarias, tuvo que ir incluso a otros salones para conseguirlas. La clase de Física era aburrida para Cesar quien intentaba ponerle atención todo lo que podía, de repente siente una reacción como si fuera una descarga o mejor dicho una presencia. Rápidamente lo primero que hace es ver por la ventana, y ver fijamente a un árbol de tronco muy alto y grandes ramas. Perla se percata de que algo le pasa a Cesar y le toca el hombro con su lápiz.
-¿te pasa algo?- le pregunta con la voz mas baja pasable para que el maestro no les llame la atención.
-No, nada…pensé ver algo- le contesta con la misma tonada de voz y da un ultimo vistazo al árbol, ignorando lo que estaba atrás de ese.
Flannagan, estaba en ese árbol vigilando los movimientos de Cesar, vestido con un traje oscuro de camuflaje –Es listo…- pensó al dar un pequeño vistazo mas- no pensé que lograría detectarme…debo verlo mas de cerca.
Las clases siguieron hasta llegar la hora de salida temprano. Los alumnos salían deprisa para ir al estadio o un restauran mas cercano donde televisarían el partido en vivo. Dafne se animo acompañar a 3 de sus compañeras, llamadas Carla, Paty y Brenda a la casa de esta ultima para ver el partido por pago por evento. Al salir de la escuela por detrás del edificio notaron aun personaje muy curioso que bailaba en una farmacia.
Se trataba de un hombre que estaba disfrazado de un personaje de dicha farmacia, de un ancianito rechoncho igual que Santa Clous, solo que sin la barba. En la mascara solo tenia un gran bigote y cejas de color blanco, con los ojos redondos y negros, en cada una de sus orejas tenia tres cabellos curveados y una sonrisa risueña; vistiendo una bata de doctor blanca e intentaba bailar una canción de un grupo juvenil.
Las chicas se reían al ver como este bailaba y saludaba a la gente que pasaba; y Paty dio un saludo y un beso a dicho personaje disfrazado; quien le respondió de la misma manera al verla. Todas se burlaban amistosamente de Paty al hacer eso, admiraban al sujeto quien usaba la botarga enfrente de esa farmacia, quien bailaba graciosamente y con cuidado de no caerse, hasta pensaban que debería de trabajar de mascota de los dos equipos que iban a jugar hoy.
Dafne se ponía a reír hasta que noto que unos muchachos, quienes intentaban molestar a la botarga, corrían como bestias hacia su presa para derribarlo. En su intento, y con asombro de todos, la botarga seguía en pie como si nada, haciendo rebotar a los jóvenes quienes cayeron al piso.
-¡waw!- dijo Brenda quien quedo boquiabierta al igual que las demás.
Dafne miro fijamente al personaje quien saludaba a los jóvenes que cayeron y se alejaron mareados. Dafne se molesto, sus amigas se alejaron y ella les avisa que después las sigue. Se acerca al personaje quien al verla enojada decide ignorarla.
-¿Adonde vas…?- lo detiene con una sola mano en el hombro-Dr. Simi…o quiero decir…Doctor Francis
-¡Rayos!- se escuchaba una voz a través del disfraz-¿Cómo lo averiguaste?
-Un Botarga sin ser derribado por un grupo de jóvenes y estar aun parado como si nada…¿te parece normal?- le gritaba a su hermano ignorando a los farmacéuticos que miraban aterrados al enojo de la chica.
Le dio un puñetazo a la cara de la botarga, no golpeo el rostro de Francis, pero si lo entumeció un poco.
-¡Cuando te hacen eso…te tienes que caer!- lo regaño- o sabrán que …-miro a los de la farmacia y nuevamente miro a su hermano- …o sabrán lo que tu sabes que eres tu…-diciendo en voz baja
-¿Qué me gusta ver las faldas de las chicas?- exclamo en voz alta.
-¡Eso no, pervertido sin remedio!- le dio otro golpe con el puño-…¡oh cielos!- dijo sorprendida.
-¿Qué sucede?- pregunto con una gran ignorancia.
-¡Olvide mi celular en la escuela!-
-Y dicen que yo soy el distraído.
Dafne le dio otro golpe y se echo a correr de nuevo a la escuela por su celular. Dejando en el suelo a su hermano, acto que no hicieron los jóvenes al tratar de empujarlo. Ella ignoraba que pasaría al llegar a su escuela. Cesar estaba sentado junto con Perla en una pequeña barda de un metro de alto, perteneciente la fachada principal del instituto que estaba la calle desolada con algunos coches estacionados. Ella se asomaba cada 5 minutos para ver la cheyenne de su padre y hablaba con Cesar al mismo tiempo.
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
oh, no habia visto el coemntario de Kate, gracias nn
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
Wow voy finalizando de esta super ash quiero mas!!!!!!!!!!
bueo esperare con ancias a que escribas más
yo con todo respeto de sus esposas y del mio
soy Team Aro!!!!!!!
jejeje
bueo esperare con ancias a que escribas más
yo con todo respeto de sus esposas y del mio
soy Team Aro!!!!!!!
jejeje
parte 2 del capitulo 2, 24 de febrero 2009
que hay, aqui dejo mi mas de entre manadas y clanes, que espero que les guste y comenten...
-¿Crees que tu padre vendrá?- preguntaba Cesar mirando el suelo en sus pies.
-Estoy segura…-dijo ella-le hable por teléfono de mi salida temprano y el se ofreció a recogerme. Se preocupan si voy sola a la casa.
-Debe quererte tanto para salir de su trabajo he ir por ti…
-Si…-suspiro volteando a ver a Cesar por un momento- aunque siempre me dejan sola cuando viajan mis padres…ellos me quieren demasiado
Cesar mostró unos ojos tristes y Perla los contemplaba con el mismo sentimiento.
-Y dime Cesar…- prosiguió ella- ¿tu familia sabe que saliste temprano hoy?
La miro con recelo mostrando el seño, pero después bajo la mirada a otro lado.
-Solo vivo con mi abuelo- decía el- el no se preocupa a que hora vengo…el cree que puedo cuidarme solo…
-Perdón…¿y tienes hermanos?
Hubo un silencio tremendo, como si el deseara no contestar esa pregunta, pero levanto la mirada y tomo la decisión de contestar. Mientras una figura en su mente se reflejaba como una fotografía en blanco y negro de dos personas, un joven que estaba de espaldas y una niña que miraba con envidia detrás de sus hombros.
-Tenía un hermano- dio un suspiro y siguió:- pero ya no lo he visto desde que yo era niño…
-¡Lo siento!- dijo Perla con un tono suave y apunto de llorar- no quería que recordaras cosas tristes…
-¡Eres una llorona!- dijo con una sonrisa para que se animara- ya paso mucho tiempo y ya no recuerdo nada de el…
-¡Discúlpame!- suplico Perla.
-Eres la reina de pedir disculpas- se burlo de Perla por un instante.
Perla miro nuevamente sobre la barda y encontró una camioneta cheyenne plateada de doble cabina, conducida por un hombre que miraba a la escuela y mantenía el motor encendido. Ella levanto sus libros y se paro para alzar su mano para saludar al conductor.
-Llegaron por mi…-decía mientras trataba de despedirse de Cesar- nos vemos mañana Cesar…
-Si nos vemos…- el tono de su voz era un susurro, Perla se dio cuenta que debió a verlo lastimado al preguntar de su familia.
La chica subió a la enorme camioneta y se alejaron rápidamente. Dejando solo a Cesar en la barda, quien aun sentado en el suelo apoyado sobre la misma barda. Se sumía en sus pensamientos y tenía un recuerdo más en su mente al haber prenunciado “hermano”. La escena de su recuerdo era el estando sumergido a 2 metros bajo el agua, y sangre proveniente de su cuerpo llegan a la superficie. Lograba ver una figura humana y sombría que caminaba a una distancia de un metro sobre la superficie del agua; en donde solo podía ver los labios de dicha persona que sonreía y Cesar memorizo a leer sus labios al decirle “eres muy débil…”
Los recuerdos terminan al escuchar unos pasos hacia el, fijo su mirada y observo que se trataban de unos chicos de un grado superior a el de la mismo instituto con un aliento alcohólico. Eran tres jóvenes quien es escaparon de clases solo para andar de parranda, con pantalón de mezclilla, dos se vestían con camisas negras mal gastadas con símbolos de bandas de rock, y otro con una camisa de los Tigres; uno que usaba camiseta negra se agacho para ver a Cesar, quien los miro con cuidado a ver que rayos querían.
-¡Oye primo!- se refería a Cesar el que se agacho-¿de casualidad no tienes un cigarro?
-¿No sabes que eso te puede matar los pulmones?...”primo”- les contesto de una forma alegre y burlándose de su lenguaje.
El chico se molesto levantándose para insultarlo.
-¡Oye no seas codo!…se ve que si tienes…-insistía, pero Cesar les negó con un silencio levantándose del suelo.
Comparaba tamaños entre los tres chicos y el, el que le hablaba era mas pequeño ni le llegaba al cuello; pero los otros dos eran mas altos que el, pero el de la camiseta del equipo de los Tigres era mas alto. El mas bajo no se intimida al tamaño de Cesar y lo provoca.
-¡Hey!...-trata de llamar su atención con enojo y lo empuja con las palmas de las manos para decirle esto al mismo tiempo:-¿Qué te crees?...¡te estoy hablando!
Cesar se mantuvo en pie mientras los chicos le estaban amenazando. Sus ojos cambiaron y se clavaban al chico que tenia enfrente. Dafne llego caminado deprisa sobre la desolada calle de la fachada principal de la escuela. Cuando de repente un sonido como de un choque a una lamina de metal la desconcentro de su caminata. Miro de donde provenía el golpe y miro en el muro, donde había botes de basura de fierro un chico de camisa negra que quedo inconciente sobre los botes que recibieron una marca por el golpe.
-¿Crees que tu padre vendrá?- preguntaba Cesar mirando el suelo en sus pies.
-Estoy segura…-dijo ella-le hable por teléfono de mi salida temprano y el se ofreció a recogerme. Se preocupan si voy sola a la casa.
-Debe quererte tanto para salir de su trabajo he ir por ti…
-Si…-suspiro volteando a ver a Cesar por un momento- aunque siempre me dejan sola cuando viajan mis padres…ellos me quieren demasiado
Cesar mostró unos ojos tristes y Perla los contemplaba con el mismo sentimiento.
-Y dime Cesar…- prosiguió ella- ¿tu familia sabe que saliste temprano hoy?
La miro con recelo mostrando el seño, pero después bajo la mirada a otro lado.
-Solo vivo con mi abuelo- decía el- el no se preocupa a que hora vengo…el cree que puedo cuidarme solo…
-Perdón…¿y tienes hermanos?
Hubo un silencio tremendo, como si el deseara no contestar esa pregunta, pero levanto la mirada y tomo la decisión de contestar. Mientras una figura en su mente se reflejaba como una fotografía en blanco y negro de dos personas, un joven que estaba de espaldas y una niña que miraba con envidia detrás de sus hombros.
-Tenía un hermano- dio un suspiro y siguió:- pero ya no lo he visto desde que yo era niño…
-¡Lo siento!- dijo Perla con un tono suave y apunto de llorar- no quería que recordaras cosas tristes…
-¡Eres una llorona!- dijo con una sonrisa para que se animara- ya paso mucho tiempo y ya no recuerdo nada de el…
-¡Discúlpame!- suplico Perla.
-Eres la reina de pedir disculpas- se burlo de Perla por un instante.
Perla miro nuevamente sobre la barda y encontró una camioneta cheyenne plateada de doble cabina, conducida por un hombre que miraba a la escuela y mantenía el motor encendido. Ella levanto sus libros y se paro para alzar su mano para saludar al conductor.
-Llegaron por mi…-decía mientras trataba de despedirse de Cesar- nos vemos mañana Cesar…
-Si nos vemos…- el tono de su voz era un susurro, Perla se dio cuenta que debió a verlo lastimado al preguntar de su familia.
La chica subió a la enorme camioneta y se alejaron rápidamente. Dejando solo a Cesar en la barda, quien aun sentado en el suelo apoyado sobre la misma barda. Se sumía en sus pensamientos y tenía un recuerdo más en su mente al haber prenunciado “hermano”. La escena de su recuerdo era el estando sumergido a 2 metros bajo el agua, y sangre proveniente de su cuerpo llegan a la superficie. Lograba ver una figura humana y sombría que caminaba a una distancia de un metro sobre la superficie del agua; en donde solo podía ver los labios de dicha persona que sonreía y Cesar memorizo a leer sus labios al decirle “eres muy débil…”
Los recuerdos terminan al escuchar unos pasos hacia el, fijo su mirada y observo que se trataban de unos chicos de un grado superior a el de la mismo instituto con un aliento alcohólico. Eran tres jóvenes quien es escaparon de clases solo para andar de parranda, con pantalón de mezclilla, dos se vestían con camisas negras mal gastadas con símbolos de bandas de rock, y otro con una camisa de los Tigres; uno que usaba camiseta negra se agacho para ver a Cesar, quien los miro con cuidado a ver que rayos querían.
-¡Oye primo!- se refería a Cesar el que se agacho-¿de casualidad no tienes un cigarro?
-¿No sabes que eso te puede matar los pulmones?...”primo”- les contesto de una forma alegre y burlándose de su lenguaje.
El chico se molesto levantándose para insultarlo.
-¡Oye no seas codo!…se ve que si tienes…-insistía, pero Cesar les negó con un silencio levantándose del suelo.
Comparaba tamaños entre los tres chicos y el, el que le hablaba era mas pequeño ni le llegaba al cuello; pero los otros dos eran mas altos que el, pero el de la camiseta del equipo de los Tigres era mas alto. El mas bajo no se intimida al tamaño de Cesar y lo provoca.
-¡Hey!...-trata de llamar su atención con enojo y lo empuja con las palmas de las manos para decirle esto al mismo tiempo:-¿Qué te crees?...¡te estoy hablando!
Cesar se mantuvo en pie mientras los chicos le estaban amenazando. Sus ojos cambiaron y se clavaban al chico que tenia enfrente. Dafne llego caminado deprisa sobre la desolada calle de la fachada principal de la escuela. Cuando de repente un sonido como de un choque a una lamina de metal la desconcentro de su caminata. Miro de donde provenía el golpe y miro en el muro, donde había botes de basura de fierro un chico de camisa negra que quedo inconciente sobre los botes que recibieron una marca por el golpe.
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
WOw!!!!
ya lo leí esta geial, GENIAL!!!
me encantó, que bueno que sigas escribiendo
eso me encanta, adoro tu historia, yo creo que soy
TEAM Dreak!!!!
vampire kisses!!!
ya lo leí esta geial, GENIAL!!!
me encantó, que bueno que sigas escribiendo
eso me encanta, adoro tu historia, yo creo que soy
TEAM Dreak!!!!
vampire kisses!!!
parte 3 del capitulo 2
que hay, aqui dejo el trozo 3 del capitulo 2, pero me gustaria ver mas comentarios...aunque me alegra que Tia me comente, gracias
Miro a una trayectoria de 6 metros para ver a Cesar con otros dos jóvenes que miraban estupefactos a los botes de basura y lentamente miraban a Cesar quien tenia la misma postura del chico que lo trataba de empujar, aun mostrando las palmas de las manos apuntando directamente a los botes de basura. Los otros dos chicos fingieron no dejarse impresionar por lo que vieron y el que tenia el traje de los tigres le dio un puñetazo a Cesar.
Cesar ni sintió el golpe en su mejilla y sujeto el brazo del muchacho, quien después de sentir haber golpeado una pared, sentía que unas pinzas de hierro gigantes le destrozaban los huesos de su muñeca. Y en menos de pocos segundos, le da una voltereta en donde cae de su hombro izquierdo y comienza a sacudirse de agonía. El otro muchacho miro a su amigo tirado en el suelo suplicando ayuda para su hombro, pero después ve a Cesar quien sus ojos se llenaron de furia hacia el para matarlo con la mirada. No lo pensó dos veces y corrió abandonando a sus compañeros solo para escapar de aquella bestia.
Cesar dio un suspiro y miro a su alrededor para ver si había un testigo. Su movió su nariz como si buscara algún rastro de testigo, percibió la aroma de una persona y la miro. Se trataba de Dafne que quedo asombrada y temblaba de miedo de a ver visto tal brutalidad que hizo el. Cesar la miro y la reconoció, al notar su rostro ella presencio todo lo ocurrido. Se lleno de duda si atacarla y matarla para no atestiguar lo que paso; sabia que a los dos que noqueo y al que se escapo, no se atreverían a decirlo si se lo dijera a alguien nadie se los creería, además de que detecto la aroma alcohólica en sus bocas. Pero Dafne era diferente, era una chica normal y a pesar que aun se sentía frustrado por lo que dijo ella en la clase de educación física, no se atrevería a matar a un humano, ignorando que Dafne no es humana.
La chica miro fijamente a Cesar y el hacia lo mismo. Una presión en su pecho molestaba a Dafne, ella sabia que el único ser que pudiera hacer lo que paso, era un vampiro. Pero los rasgos de Cesar eran diferentes a los de un vampiro, e incluso ella vio que sudaba al estar en el sol. ¿Qué es Cesar? Era la pregunta que se ponía en su mente.
-Se que escuche un ruido por aquí…-se oía una voz que se acercaba.
Cesar no lo pensó dos veces y salio corriendo olvidando a su testigo. Corría más veloz que un humano cualquiera, más que un atleta. Dafne quedo aun parada siguiendo a Cesar con la vista hasta que lo perdió de vista. Varios maestros se acercaban a l ver y reconocer a los estudiantes en un mal estado, oliendo también su estado de ebriedad. Uno de los maestros que resultaba ser el maestro Contreras, miro a Dafne y se acerco a ella.
-Dafne…-tratando de llamar su atención- ¿viste que paso aquí?
-¿eh?...-exclamo. Intento decir lo que vio, pero si lo dijera también pensarían que estaba loca así que…-no vi nada…- uso una de las excusas más viejas del mundo.
El maestro cayo fácil y creyó en las palabras de Dafne. Ella hasta olvido de recoger su celular en el salón, su mente se concentro en lo que vio y como tratar de olvidarlo. Lo mejor era ir a la casa de Brenda y disfrutar el partido que estaba apunto de comenzar. Fue a la casa que estaba lleno de familiares de la amiga de Dafne, hasta tenían que sentarse en el suelo para ver el partido que se transmitía en pago por evento. A pesar de que era el partido mas intenso de su vida, aun tenía en su mente lo que había visto en la escuela.
Si Cesar era un vampiro o no. Todo ese tema lo tenía que platicar a su padre, después del partido, pero no quería ir a casa sola, menos si es acompañada por una de sus amigas, así que uso el teléfono de Brenda y llama a casa. Para su desgracia contesta Francis que había llegado del trabajo; pero acepto ir por Dafne a la casa de su amiga. Después del partido con un marcador de 1 a 0 favor de Rayados, un gol que era de película anotado en los tiempos extras. Dafne espero adentro de la casa de Brenda por mediadora y Francis no había llegado, preocupada intentaba hablar de nuevo a su casa, pero un claxon de un bocho la aviso de que su hermano había llegado.
Un bocho que no era normal para nadie, solo para Francis. Con una antena de color azul y una cola de mapache en la punta; las ventanas cromadas con brillo y en su contorno, dibujado como graffiti el nombre Francis de color anaranjado con un fondo azul. Dafne se despidió de Brenda y le agradeció su hospitalidad, al salir se aseguraba que no saliera nada de los arbustos, si por si Cesar intentaba matarla por lo que vio. Entro con cuidado al bocho y espero que Francis acelerara el motor.
-¿estas bien?...-decía al ver a Dafne- te veo tensa..-apunto de reírse.
-Solo conduce- dijo preocupada y su hermano lo hizo.
-¿Qué fue tan malo el partido para ponerte así? – decía mientras conducía con una mano.
-No….ganamos a uno a cero
-¿entonces?...
Dafne no sabia si empezar a decirle a su hermano lo que vio; pero se trataba de Francis, el idiota de su familia. Pero aun así, pensó que se enteraría tarde o temprano. Miro la ventanilla del copiloto y la cerro lentamente. Espero un alto y trato de contar lo que pudo.
-Francis…
-¿si?
-¿Hay mas vampiros como nosotros?....-pregunto
-¿Qué pregunta es esa?- apunto de reírse – hay miles de especies de vampiros…
-¿Y vampiros que sudan?
Por primera vez, Dafne mira el rostro serio y preocupado de Francis. Un rostro que indicaba que si se trataba de su hermano legitimo, estaciono su bocho y miro a su hermana con una seriedad escalofriante.
-¡Dime que fue lo que vistes!- ordeno mirándola a los ojos, al parecer Dafne se dio cuanta que su hermano Francis sabia algo que no querían contarle a ella.
Miro a una trayectoria de 6 metros para ver a Cesar con otros dos jóvenes que miraban estupefactos a los botes de basura y lentamente miraban a Cesar quien tenia la misma postura del chico que lo trataba de empujar, aun mostrando las palmas de las manos apuntando directamente a los botes de basura. Los otros dos chicos fingieron no dejarse impresionar por lo que vieron y el que tenia el traje de los tigres le dio un puñetazo a Cesar.
Cesar ni sintió el golpe en su mejilla y sujeto el brazo del muchacho, quien después de sentir haber golpeado una pared, sentía que unas pinzas de hierro gigantes le destrozaban los huesos de su muñeca. Y en menos de pocos segundos, le da una voltereta en donde cae de su hombro izquierdo y comienza a sacudirse de agonía. El otro muchacho miro a su amigo tirado en el suelo suplicando ayuda para su hombro, pero después ve a Cesar quien sus ojos se llenaron de furia hacia el para matarlo con la mirada. No lo pensó dos veces y corrió abandonando a sus compañeros solo para escapar de aquella bestia.
Cesar dio un suspiro y miro a su alrededor para ver si había un testigo. Su movió su nariz como si buscara algún rastro de testigo, percibió la aroma de una persona y la miro. Se trataba de Dafne que quedo asombrada y temblaba de miedo de a ver visto tal brutalidad que hizo el. Cesar la miro y la reconoció, al notar su rostro ella presencio todo lo ocurrido. Se lleno de duda si atacarla y matarla para no atestiguar lo que paso; sabia que a los dos que noqueo y al que se escapo, no se atreverían a decirlo si se lo dijera a alguien nadie se los creería, además de que detecto la aroma alcohólica en sus bocas. Pero Dafne era diferente, era una chica normal y a pesar que aun se sentía frustrado por lo que dijo ella en la clase de educación física, no se atrevería a matar a un humano, ignorando que Dafne no es humana.
La chica miro fijamente a Cesar y el hacia lo mismo. Una presión en su pecho molestaba a Dafne, ella sabia que el único ser que pudiera hacer lo que paso, era un vampiro. Pero los rasgos de Cesar eran diferentes a los de un vampiro, e incluso ella vio que sudaba al estar en el sol. ¿Qué es Cesar? Era la pregunta que se ponía en su mente.
-Se que escuche un ruido por aquí…-se oía una voz que se acercaba.
Cesar no lo pensó dos veces y salio corriendo olvidando a su testigo. Corría más veloz que un humano cualquiera, más que un atleta. Dafne quedo aun parada siguiendo a Cesar con la vista hasta que lo perdió de vista. Varios maestros se acercaban a l ver y reconocer a los estudiantes en un mal estado, oliendo también su estado de ebriedad. Uno de los maestros que resultaba ser el maestro Contreras, miro a Dafne y se acerco a ella.
-Dafne…-tratando de llamar su atención- ¿viste que paso aquí?
-¿eh?...-exclamo. Intento decir lo que vio, pero si lo dijera también pensarían que estaba loca así que…-no vi nada…- uso una de las excusas más viejas del mundo.
El maestro cayo fácil y creyó en las palabras de Dafne. Ella hasta olvido de recoger su celular en el salón, su mente se concentro en lo que vio y como tratar de olvidarlo. Lo mejor era ir a la casa de Brenda y disfrutar el partido que estaba apunto de comenzar. Fue a la casa que estaba lleno de familiares de la amiga de Dafne, hasta tenían que sentarse en el suelo para ver el partido que se transmitía en pago por evento. A pesar de que era el partido mas intenso de su vida, aun tenía en su mente lo que había visto en la escuela.
Si Cesar era un vampiro o no. Todo ese tema lo tenía que platicar a su padre, después del partido, pero no quería ir a casa sola, menos si es acompañada por una de sus amigas, así que uso el teléfono de Brenda y llama a casa. Para su desgracia contesta Francis que había llegado del trabajo; pero acepto ir por Dafne a la casa de su amiga. Después del partido con un marcador de 1 a 0 favor de Rayados, un gol que era de película anotado en los tiempos extras. Dafne espero adentro de la casa de Brenda por mediadora y Francis no había llegado, preocupada intentaba hablar de nuevo a su casa, pero un claxon de un bocho la aviso de que su hermano había llegado.
Un bocho que no era normal para nadie, solo para Francis. Con una antena de color azul y una cola de mapache en la punta; las ventanas cromadas con brillo y en su contorno, dibujado como graffiti el nombre Francis de color anaranjado con un fondo azul. Dafne se despidió de Brenda y le agradeció su hospitalidad, al salir se aseguraba que no saliera nada de los arbustos, si por si Cesar intentaba matarla por lo que vio. Entro con cuidado al bocho y espero que Francis acelerara el motor.
-¿estas bien?...-decía al ver a Dafne- te veo tensa..-apunto de reírse.
-Solo conduce- dijo preocupada y su hermano lo hizo.
-¿Qué fue tan malo el partido para ponerte así? – decía mientras conducía con una mano.
-No….ganamos a uno a cero
-¿entonces?...
Dafne no sabia si empezar a decirle a su hermano lo que vio; pero se trataba de Francis, el idiota de su familia. Pero aun así, pensó que se enteraría tarde o temprano. Miro la ventanilla del copiloto y la cerro lentamente. Espero un alto y trato de contar lo que pudo.
-Francis…
-¿si?
-¿Hay mas vampiros como nosotros?....-pregunto
-¿Qué pregunta es esa?- apunto de reírse – hay miles de especies de vampiros…
-¿Y vampiros que sudan?
Por primera vez, Dafne mira el rostro serio y preocupado de Francis. Un rostro que indicaba que si se trataba de su hermano legitimo, estaciono su bocho y miro a su hermana con una seriedad escalofriante.
-¡Dime que fue lo que vistes!- ordeno mirándola a los ojos, al parecer Dafne se dio cuanta que su hermano Francis sabia algo que no querían contarle a ella.
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
parte 1 del capitulo 3
que hay familia, aunque solo veo que alguien da su opinion de mi relato UU
aun asi dejo el capitulo para este fan, pero desearia que alguien mas diera su opinion X3
Entre manadas y clanes
Capitulo 3: un cuento
Dafne le contó a su hermano Francis desde la llegada de Cesar al instituto hasta el día de hoy. Los dos aun estaban dentro del bocho extraño de Francis, estacionados enfrente de una tienda de calzado. Francis se sujetaba en el volante escuchando atentamente cada palabra de su hermana.
-Y eso fue lo que paso...- finalizo ella sin mirar a su hermano, agachada viendo como juntaba sus manos.
Francis suspiro mientras pensaba como decirle a su hermana lo ocurrido. Frunció el seño y después trato de relajarse.
-El sudaba…¿cierto?-pregunto mientras tenia los ojos cerrados.
-Si..-contesto ella, mirando lo preocupado que estaba su hermano-¿Tu crees que exista un vampiro que sude?
-Mira…hay muchos tipos de vampiros…-tratando de explicarle - pero no existe uno que sude.
-¿entonces?- pregunto exaltada.
-Pues…….mira la hora va comenzar Smallville y tengo que ver Lost- tratando de cambiar el tema.
Dafne detecta como su hermano intenta esquivar la pregunta. Y Francis se da cuenta que no puede engañar a su hermana.
-Esta bien…-aceptando la realidad- existen mas seres sobre naturales además de nosotros.
-¿Cómo cuales?
-Hombres lobo…
Al decirle eso, se ocasiono un silencio profundo. Dafne quedo sorprendida al escuchar el nombre de uno de los seres sobrenaturales que a igual que los vampiros. Su mente se encontraba confusa, ella creía que solo los vampiros existían en este mundo.
-¿Un…hombre lobo?- pregunto asustada
-Bueno…ellos prefieren llamarse licántropos- le explicaba mientras revisaba los alrededores en las ventanillas del bocho – son muy diferentes a nosotros, ellos viven de carne, mientras nosotros vivimos gracias al sabor de la sangre…
-Pero yo… - Dafne lo interrumpió con una voz muy suave – no tengo esa sed de Sangre que ustedes tienen.
-Es que tu eres distinta – le dijo en susurro – lo que te digo es que los licántropos son como nuestros rivales, eso ha existido desde muchas generaciones
Continúo el tema ignorando lo de Dafne, pero ella se concentro en lo que decía su hermano. Francis se toco las sienes y decidió continuar.
-Nuestro padre me matara si te sigo contando, pero no te hará daño si te cuento lo que te voy a decir – miro a Dafne y ella estaba dispuesta a escuchar – los licántropos y los vampiros hemos nacido del mismo padre, pero distintas madres. Creerás que lo estoy inventando de una película, pero no es así. El hombre nació con un don, el don de la inmortalidad sin juventud, gracias a ese don, fue nombrado un campeón en múltiples guerras, ganaba o perdía, el seguía vivo y después se convirtió en un conde.
-¿seguro que no lo estas inventando? – interrumpieron y mostrando una mirada escéptica.
-Por supuesto que no – con una tonada de voz molesta – lo que te digo es enserio – prosiguió – se propuso matrimonio con una bella joven, decían que ella era muy hermosa de cabellos negros como la noche, piel tan blanca y pálida; y con unos ojos que hipnotizaba a la gente. Después de su matrimonio, el conoció a otra joven, era una campesina que la llevo a su palacio para trabajar como sirvienta. Una noche se descubrió que a la esposa del conde, embarazada de este, fue mordida por un murciélago; infectada por la saliva de ese animal, estaba apunta de morir y tenia que dar a luz a su hijo de inmediato.
-¿Qué le paso a la mujer?- pregunto asombrada Dafne.
-Murió después de dar a luz a su hijo, ese niño era el primer vampiro.
-¿y como se llamo ese niño?...
-Nos tiene prohibido revelar ese nombre hasta hora…solo los vampiros que han cumplido 500 años de edad les tiene permitido dar ese nombre…
-¿Y que le paso…a la sirvienta? – pregunto al recordar el otro personaje del relato.
-Tuvo otro hijo del conde que nació el día después del nacimiento del primer vampiro – Dafne quedo sorprendida – no te sorprendas, era obvio que esa era la razón de llevarla a su casa, lo que no sabían es que ella se dedicaba a la brujería y usaba animales para su propósito.
-¿Qué tiene que ver con eso de los licántropos?
-¿No lo has captado?...el otro niño que nació, es el primer licántropo – al fin Dafne lo capto – la bruja fue cruel con su primer hijo, hasta lo intento de matarlo marcándole una maldición de convertirlo en lobo por las noches para matar gente inocente, niños entre otros. Hasta que por fin el logro mantener control y usar la maldición a su favor.
aun asi dejo el capitulo para este fan, pero desearia que alguien mas diera su opinion X3
Entre manadas y clanes
Capitulo 3: un cuento
Dafne le contó a su hermano Francis desde la llegada de Cesar al instituto hasta el día de hoy. Los dos aun estaban dentro del bocho extraño de Francis, estacionados enfrente de una tienda de calzado. Francis se sujetaba en el volante escuchando atentamente cada palabra de su hermana.
-Y eso fue lo que paso...- finalizo ella sin mirar a su hermano, agachada viendo como juntaba sus manos.
Francis suspiro mientras pensaba como decirle a su hermana lo ocurrido. Frunció el seño y después trato de relajarse.
-El sudaba…¿cierto?-pregunto mientras tenia los ojos cerrados.
-Si..-contesto ella, mirando lo preocupado que estaba su hermano-¿Tu crees que exista un vampiro que sude?
-Mira…hay muchos tipos de vampiros…-tratando de explicarle - pero no existe uno que sude.
-¿entonces?- pregunto exaltada.
-Pues…….mira la hora va comenzar Smallville y tengo que ver Lost- tratando de cambiar el tema.
Dafne detecta como su hermano intenta esquivar la pregunta. Y Francis se da cuenta que no puede engañar a su hermana.
-Esta bien…-aceptando la realidad- existen mas seres sobre naturales además de nosotros.
-¿Cómo cuales?
-Hombres lobo…
Al decirle eso, se ocasiono un silencio profundo. Dafne quedo sorprendida al escuchar el nombre de uno de los seres sobrenaturales que a igual que los vampiros. Su mente se encontraba confusa, ella creía que solo los vampiros existían en este mundo.
-¿Un…hombre lobo?- pregunto asustada
-Bueno…ellos prefieren llamarse licántropos- le explicaba mientras revisaba los alrededores en las ventanillas del bocho – son muy diferentes a nosotros, ellos viven de carne, mientras nosotros vivimos gracias al sabor de la sangre…
-Pero yo… - Dafne lo interrumpió con una voz muy suave – no tengo esa sed de Sangre que ustedes tienen.
-Es que tu eres distinta – le dijo en susurro – lo que te digo es que los licántropos son como nuestros rivales, eso ha existido desde muchas generaciones
Continúo el tema ignorando lo de Dafne, pero ella se concentro en lo que decía su hermano. Francis se toco las sienes y decidió continuar.
-Nuestro padre me matara si te sigo contando, pero no te hará daño si te cuento lo que te voy a decir – miro a Dafne y ella estaba dispuesta a escuchar – los licántropos y los vampiros hemos nacido del mismo padre, pero distintas madres. Creerás que lo estoy inventando de una película, pero no es así. El hombre nació con un don, el don de la inmortalidad sin juventud, gracias a ese don, fue nombrado un campeón en múltiples guerras, ganaba o perdía, el seguía vivo y después se convirtió en un conde.
-¿seguro que no lo estas inventando? – interrumpieron y mostrando una mirada escéptica.
-Por supuesto que no – con una tonada de voz molesta – lo que te digo es enserio – prosiguió – se propuso matrimonio con una bella joven, decían que ella era muy hermosa de cabellos negros como la noche, piel tan blanca y pálida; y con unos ojos que hipnotizaba a la gente. Después de su matrimonio, el conoció a otra joven, era una campesina que la llevo a su palacio para trabajar como sirvienta. Una noche se descubrió que a la esposa del conde, embarazada de este, fue mordida por un murciélago; infectada por la saliva de ese animal, estaba apunta de morir y tenia que dar a luz a su hijo de inmediato.
-¿Qué le paso a la mujer?- pregunto asombrada Dafne.
-Murió después de dar a luz a su hijo, ese niño era el primer vampiro.
-¿y como se llamo ese niño?...
-Nos tiene prohibido revelar ese nombre hasta hora…solo los vampiros que han cumplido 500 años de edad les tiene permitido dar ese nombre…
-¿Y que le paso…a la sirvienta? – pregunto al recordar el otro personaje del relato.
-Tuvo otro hijo del conde que nació el día después del nacimiento del primer vampiro – Dafne quedo sorprendida – no te sorprendas, era obvio que esa era la razón de llevarla a su casa, lo que no sabían es que ella se dedicaba a la brujería y usaba animales para su propósito.
-¿Qué tiene que ver con eso de los licántropos?
-¿No lo has captado?...el otro niño que nació, es el primer licántropo – al fin Dafne lo capto – la bruja fue cruel con su primer hijo, hasta lo intento de matarlo marcándole una maldición de convertirlo en lobo por las noches para matar gente inocente, niños entre otros. Hasta que por fin el logro mantener control y usar la maldición a su favor.
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
WOw y recontra WOW!!!!!
me meto cada vez más en tu historia, está genial, genial...
sigue escribiendo, yoseguiré posteando, y no sean mala onda
posteen es super duper la historia de Aro...bueno vampire kisses...
PD: POrfa familia no dejan toda una amistad caer por la borda...sólo eso
cuidense
me meto cada vez más en tu historia, está genial, genial...
sigue escribiendo, yoseguiré posteando, y no sean mala onda
posteen es super duper la historia de Aro...bueno vampire kisses...
PD: POrfa familia no dejan toda una amistad caer por la borda...sólo eso
cuidense
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
parte 2 del capitulo 3, espero que les guste si me dejan mas comentarios...
-Los dos niños nacieron inmortales, ¿cierto?- pregunto Dafne, como suplicando que fuera al grano del tema.
-Si nacieron inmortales…el primer vampiro tenía una sed de sangre que mato a todos los del palacio y algunos se convirtieron en vampiros. Aun inmortales se podían matar gracias a que aun tiene algo de humanidad en su interior – le advirtió a Dafne marcándole con su dedo en su rostro.
-Pero…-aun con duda Dafne sobre el tema – aun tengo duda sobre lo que mencionaste…una rivalidad entre vampiros y licántropos…¿Cómo sucedió eso?.
-El origen de nuestras razas te lo puedo contar…la causa no…- dijo mostrando una sonrisa burlona, logrando enfadar a Dafne.
-Entonces ¿por que me contaste esa historia? – mostrando una mirada amenazante a su hermano.
-Esta bien…-tratando de calmarla – si quieres saberlo, sin meterme en problemas, hay algo que puedes hacer tu misma, solo debes investigar un relato que cuenta toda la historia de nuestra lucha.
-¿Y cual es? – pregunto impaciente.
-Caperucita roja…
-¡No te burles de miii! – resaltó enojada sobre su hermano quien intenta calmarla.
-Hablo enserio…- con una voz preocupante – si sigo diciéndote mas, mi padre me matara…y no hablemos de esto tampoco con Drake, ¿de acuerdo?
-¡Esta bien!…- acepto Dafne ante la oferta de su hermano, aunque la historia que le contó no era del caso de lo que ocurrió al ver a Cesar.
Con esa información era necesaria para averiguar si Cesar es lo que Francis cree, un licántropo. Y para aclarar sus dudas, decidió investigar a fondo sobre dicho cuento mencionado. Al regresar a su casa, noto la ausencia de su padre.
-Francis, ¿Dónde esta papá?
-No lo se…desde que llegue de mi trabajo no estaba aquí.
Dafne y Francis decidieron a esperar, también faltaba la presencia de Drake. Flannagan siguió a Cesar hasta su casa, sigilosamente llego hasta la rama de un árbol. Miraba al joven sin que este lo detectara. La casa de Cesar estaba ubicada muy lejos de la cuidad, a colina arriba en un barrio muy bajo y abandonado. Cesar volteo a ver su espalda al notar el árbol donde estaba Flannagan, pero este no estaba. Al voltear a ver la puerta de la fachada, Flannagan estaba enfrente de el.
-¡Buenas noches! – le hablo al asombrado joven quien se erizo el cabello y mostró un gruñido ante el – tranquilo, solo quiero hablar…- mostró una sonrisa y Cesar se tranquilizo al sentir que no había ninguna amenaza en el.
Al día siguiente, Cesar no asistió a las primeras dos clases, preocupando a Perla quien miraba el asiento vació de su dichoso amigo. Dafne observaba cuidadosamente la entrada del salón si el se atrevería entrar Cesar al salón. Pasaron otras dos clases y la esperanza en que entrara al salón se perdieron.
Dafne regreso al salón después de su descanso y en su silla encontró una nota. La levanto y esta decía “te espero después de clases en la cafetería…Atte: Cesar”. Se mostró pasmada al ver la nota. Se preguntaba si el se equivoco de silla y que la nota era para Perla. Pero eso no era posible ya que ellos se sientan a lado de la ventana de afuera del salón. Se preocupo al sentir que le haría daño al atestiguar lo que vio ayer. Cada minuto que pasaban las clases, mas era la angustia y la duda de ir o no ir a la cafetería. Pero se dio un golpe con la palma en la mano y pensó.
-¡Que tonta!...yo también tengo mucha fuerza – pensó al ver lo tonta que es – si el me ataca, me defenderé.
Termino la última clase, y Dafne camino directo a la cafetería de la escuela. Al ver mucha gente adentro, pensó que el no seria capaz de atácala y mucho menos ella a el. Lo encontró en el marco de la puerta de cristal, vestido con una camisa negra con las mangas recogidas al hombro y con el mismo pantalón de mezclilla rota en las rodillas. Ella no se sentía mal en su forma de vestir, ya que ella usaba una camisa sin mangas, pero decidió colocarse su chamarra para no verse tan informal como el.
-¡Hola! – saludo Dafne a Cesar con mucho temor.
-¡Hola! – le respondió el saludo y prosiguió el – lo que paso ayer…¿Qué fue lo que viste?
-Los dos niños nacieron inmortales, ¿cierto?- pregunto Dafne, como suplicando que fuera al grano del tema.
-Si nacieron inmortales…el primer vampiro tenía una sed de sangre que mato a todos los del palacio y algunos se convirtieron en vampiros. Aun inmortales se podían matar gracias a que aun tiene algo de humanidad en su interior – le advirtió a Dafne marcándole con su dedo en su rostro.
-Pero…-aun con duda Dafne sobre el tema – aun tengo duda sobre lo que mencionaste…una rivalidad entre vampiros y licántropos…¿Cómo sucedió eso?.
-El origen de nuestras razas te lo puedo contar…la causa no…- dijo mostrando una sonrisa burlona, logrando enfadar a Dafne.
-Entonces ¿por que me contaste esa historia? – mostrando una mirada amenazante a su hermano.
-Esta bien…-tratando de calmarla – si quieres saberlo, sin meterme en problemas, hay algo que puedes hacer tu misma, solo debes investigar un relato que cuenta toda la historia de nuestra lucha.
-¿Y cual es? – pregunto impaciente.
-Caperucita roja…
-¡No te burles de miii! – resaltó enojada sobre su hermano quien intenta calmarla.
-Hablo enserio…- con una voz preocupante – si sigo diciéndote mas, mi padre me matara…y no hablemos de esto tampoco con Drake, ¿de acuerdo?
-¡Esta bien!…- acepto Dafne ante la oferta de su hermano, aunque la historia que le contó no era del caso de lo que ocurrió al ver a Cesar.
Con esa información era necesaria para averiguar si Cesar es lo que Francis cree, un licántropo. Y para aclarar sus dudas, decidió investigar a fondo sobre dicho cuento mencionado. Al regresar a su casa, noto la ausencia de su padre.
-Francis, ¿Dónde esta papá?
-No lo se…desde que llegue de mi trabajo no estaba aquí.
Dafne y Francis decidieron a esperar, también faltaba la presencia de Drake. Flannagan siguió a Cesar hasta su casa, sigilosamente llego hasta la rama de un árbol. Miraba al joven sin que este lo detectara. La casa de Cesar estaba ubicada muy lejos de la cuidad, a colina arriba en un barrio muy bajo y abandonado. Cesar volteo a ver su espalda al notar el árbol donde estaba Flannagan, pero este no estaba. Al voltear a ver la puerta de la fachada, Flannagan estaba enfrente de el.
-¡Buenas noches! – le hablo al asombrado joven quien se erizo el cabello y mostró un gruñido ante el – tranquilo, solo quiero hablar…- mostró una sonrisa y Cesar se tranquilizo al sentir que no había ninguna amenaza en el.
Al día siguiente, Cesar no asistió a las primeras dos clases, preocupando a Perla quien miraba el asiento vació de su dichoso amigo. Dafne observaba cuidadosamente la entrada del salón si el se atrevería entrar Cesar al salón. Pasaron otras dos clases y la esperanza en que entrara al salón se perdieron.
Dafne regreso al salón después de su descanso y en su silla encontró una nota. La levanto y esta decía “te espero después de clases en la cafetería…Atte: Cesar”. Se mostró pasmada al ver la nota. Se preguntaba si el se equivoco de silla y que la nota era para Perla. Pero eso no era posible ya que ellos se sientan a lado de la ventana de afuera del salón. Se preocupo al sentir que le haría daño al atestiguar lo que vio ayer. Cada minuto que pasaban las clases, mas era la angustia y la duda de ir o no ir a la cafetería. Pero se dio un golpe con la palma en la mano y pensó.
-¡Que tonta!...yo también tengo mucha fuerza – pensó al ver lo tonta que es – si el me ataca, me defenderé.
Termino la última clase, y Dafne camino directo a la cafetería de la escuela. Al ver mucha gente adentro, pensó que el no seria capaz de atácala y mucho menos ella a el. Lo encontró en el marco de la puerta de cristal, vestido con una camisa negra con las mangas recogidas al hombro y con el mismo pantalón de mezclilla rota en las rodillas. Ella no se sentía mal en su forma de vestir, ya que ella usaba una camisa sin mangas, pero decidió colocarse su chamarra para no verse tan informal como el.
-¡Hola! – saludo Dafne a Cesar con mucho temor.
-¡Hola! – le respondió el saludo y prosiguió el – lo que paso ayer…¿Qué fue lo que viste?
Aro Vulturi- Mensajes : 34
Fecha de inscripción : 12/01/2009
Edad : 40
Re: Entre manadas y clanes (19/ marzo/09)
hola!! creo q ya nadie se acuerda del foro, porque tuvo que separarse la familia?
todo era perfecto, teniamos lindos planes y de pronto todo se disolvio, los extraño a todos juntos, espero que todos esten bien y bueno Aro, esta genial lo q escribiste sigo leyendolo, aunq no sigas escribiendo, yo aun tengo un huequito en mi corazón para todos y cada uno de ustedes, esta genial la historia, me encantaaria saber como termina cuidate q estes bien. bye
todo era perfecto, teniamos lindos planes y de pronto todo se disolvio, los extraño a todos juntos, espero que todos esten bien y bueno Aro, esta genial lo q escribiste sigo leyendolo, aunq no sigas escribiendo, yo aun tengo un huequito en mi corazón para todos y cada uno de ustedes, esta genial la historia, me encantaaria saber como termina cuidate q estes bien. bye
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